Los precios en El Salvador, Costa Rica y Panamá continuaron en julio en caída, al menos según los resultados de la inflación publicados por los bancos centrales, sin que esto se traduzca en un verdadero alivio para los hogares centroamericanos.
La Secretaría Ejecutiva del Consejo Monetario Centroamericano (Secmca) señala en su último informe sobre la inflación que Centroamérica y República Dominicana registraron un promedio de un 1.53 % a julio, una desaceleración en comparación con el 2.98 % documentado en igual período de 2024.
Dicha reducción viene sostenida, en gran parte, porque tres economías registran deflación, es decir, una caída generalizada de precios. Al contrario, Honduras mantiene la mayor inflación interanual de un 4.41 % a julio, seguido de Guatemala con un 1.16 %, y Nicaragua de un 0.64 %.
Panamá registra deflación desde septiembre de 2024 y cerró en julio con una tasa interanual de un -0.36 %, mientras que Costa Rica tiene tres meses y se situó en -0.61%. El Salvador acumula cuatro meses tras cerrar en -0.14 %.
¿Esto es bueno? En esencia no, ya que los economistas advierten que cuando ocurre una deflación es porque las empresas perciben una menor demanda y deben bajar los precios para mantener los niveles de producción; sin embargo, las personas suelen aplazar las compras porque esperan un menor costo y, de esa manera, se genera un ciclo de desajustes en el mercado.
En números ocurre una reducción de precios, pero, por el momento, no es perceptible del todo para los consumidores. Para ilustrar, en El Salvador la canasta básica alimentaria (CBA) aumentó $2 y se colocó en $255.06 en la zona urbana, el mayor valor desde agosto de 2024.
Significa entonces que hay una caída en relación con los precios registrados hace un año (julio de 2024), pero en el comparativo de corto plazo no se traduce en menores costos y los salvadoreños pagan más por los alimentos.
¿Dónde caen los precios?
La inflación se calcula a partir del Índice de Precios al Consumidor (IPC), una canasta de bienes y servicios de mayor demanda de la población. La cantidad de productos varía por países, según la metodología aplicada en las mediciones.
Costa Rica registra deflación en las divisiones de alimentos y bebidas no alcohólicas; bebidas alcohólicas y tabaco; comunicaciones; muebles y artículos para el hogar; prendas de vestir y calzado; y transporte.
El Salvador también reporta deflación en alimentos y bebidas no alcohólicas; comunicaciones; prendas de vestir y calzado; transporte; muebles y artículos para el hogar; y creación y cultura.
Panamá, en tanto, tiene deflación en las divisiones de alojamiento, agua, electricidad, gas y otros combustibles, así como en comunicaciones; muebles y artículos para el hogar; prendas de vestir y calzado; recreación y cultura; salud; y transporte.