El presidente de Costa Rica, Rodrigo Chaves, descartó la posibilidad de construir una megacárcel como la inaugurada en enero de este año por su homólogo salvadoreño Nayib Bukele, a menos que se realicen profundas reformas legales en el país. Según Chaves, la prioridad es lograr una mayoría suficiente en la Asamblea Legislativa para modificar las leyes y limitar la ejecución condicional de las penas.
En su conferencia de prensa semanal, Chaves explicó que cualquier iniciativa de este tipo requeriría un cambio estructural en el marco legal y el apoyo del Congreso.
“Primero arreglemos las leyes. Adquiramos una mayoría suficiente en el Congreso para cambiar leyes, pedirles cuentas a los magistrados y hacer reformas sustanciales, y ahí empezamos a hablar de un Cecot de alta capacidad”, afirmó, refiriéndose al modelo penitenciario de máxima seguridad de El Salvador.
El Cecot y la influencia de Bukele
El Centro de Confinamiento del Terrorismo (Cecot) es una megacárcel inaugurada por Bukele bajo el régimen de excepción, que ha restringido libertades individuales en El Salvador.
Diseñado para albergar hasta 40,000 presuntos pandilleros, el Cecot ha sido presentado como una “pieza fundamental” en la estrategia de Bukele para combatir la delincuencia.
Durante una reciente visita de trabajo al Centro de Atención Institucional La Reforma, Chaves recibió a Bukele, quien propuso reformas al sistema penal costarricense y criticó su régimen penitenciario, calificándolo de permisivo por otorgar derechos a los reclusos como acceso a internet, televisión y visitas íntimas.
Críticas al sistema judicial costarricense
Chaves también expresó preocupación por la reincidencia de criminales liberados bajo la ejecución condicional de la pena, citando casos de sicarios y delincuentes de alto perfil que regresan a las calles.
“¿Para qué tener un Cecot si los sueltan como les da la gana?”, cuestionó, en referencia a la necesidad de un marco legal más estricto antes de considerar una megacárcel en Costa Rica.
El mandatario enfatizó que cualquier avance dependerá del rumbo político tras las elecciones de 2026 y reiteró que no buscará la reelección presidencial, aunque mostró esperanzas de que su partido logre una mayoría legislativa.