La Oficina de Derechos Humanos de la ONU advirtió sobre la posibilidad de que un grupo de venezolanos deportados desde Estados Unidos a El Salvador se encuentre en situación de desaparición forzada, debido a la falta total de información oficial sobre su paradero y estado legal.
Según explicó la portavoz del organismo, Liz Throssell, se estima que unas 250 personas, en su mayoría venezolanas, fueron trasladadas a territorio salvadoreño sin que sus nombres aparezcan en registros públicos, ni por parte de las autoridades estadounidenses ni salvadoreñas.
“Muchos de los familiares entrevistados expresaron su profunda angustia por no saber dónde y en qué circunstancias están sus seres queridos”, indicó Throssell durante una conferencia de prensa.
#URGENTE| primeras imágenes de los migrantes venezolanos en la cárcel del CECOT en El Salvador gritan a las autoridades estadounidenses, una delegación bipartidista del congreso que visita el centro “libertad libertad, queremos libertad estamos secuestrados”, se escucha decir a… pic.twitter.com/E2BILiqYv3
— Madelein Garcia (@madeleintlSUR) May 13, 2025
Detenciones sin garantías legales
La ONU indicó que algunos deportados habrían sido enviados al Centro de Confinamiento del Terrorismo (CECOT), una cárcel de máxima seguridad en El Salvador, conocida por sus estrictas condiciones.
De acuerdo con la información recabada por la Oficina de Derechos Humanos, en ese lugar las personas detenidas carecen de acceso a representación legal, visitas familiares o contacto con el exterior.
Según cifras oficiales citadas por la portavoz, entre el 20 de enero y el 29 de abril, más de 142 mil personas fueron deportadas desde Estados Unidos.
De ese total, al menos 245 venezolanos y 30 salvadoreños fueron enviados específicamente a El Salvador, aunque su situación sigue sin aclararse.
“Muchos no fueron informados de que serían deportados a un tercer país, ni tuvieron acceso a abogados, ni la posibilidad de apelar la decisión antes de ser expulsados”, detalló Throssell.
La ONU subraya que esta situación plantea serias preocupaciones en materia de derechos humanos, entre ellas la violación al debido proceso, la detención arbitraria, la igualdad ante la ley y la protección contra la tortura.
Condiciones alarmantes y retórica hostil
Además, el organismo advirtió sobre las condiciones de traslado y detención, afirmando que algunas personas fueron encadenadas y que el discurso utilizado contra los migrantes ha sido “degradante”.
Throssell recalcó que, de confirmarse los hechos, podrían configurarse desapariciones forzadas según el derecho internacional humanitario.
La ONU hizo un llamado a las autoridades de Estados Unidos y El Salvador a esclarecer la situación de las personas deportadas y garantizar sus derechos básicos conforme a los estándares internacionales.