El sistema de salud de Honduras atraviesa una grave crisis, reflejada en el colapso del Hospital Escuela, el principal centro de atención pública del país. Debido a la falta de recursos y la paralización del personal médico por impagos, cientos de pacientes han quedado sin atención.
Las salas de emergencia, en lugar de ofrecer un espacio seguro para atender a los enfermos, se han convertido en zonas de hacinamiento donde muchos pacientes deben esperar sobre camillas en mal estado o, en el peor de los casos, acostados en el suelo con cartones. Aquellos que llegan sin pertenencias simplemente deben permanecer en el piso sin asistencia.
Esta crisis se agrava por las condiciones laborales del personal sanitario.
Médicos, enfermeros y auxiliares llevan más de una semana en huelga exigiendo el pago de salarios atrasados, la asignación de plazas de trabajo y la entrega de becas.
El Colegio Médico de Honduras (CMH), que agrupa a los profesionales del sector, ha denunciado que el Gobierno pretende imponer nuevas condiciones para renovar contratos, lo que consideran una violación a sus derechos laborales.
En un comunicado, el gremio advirtió que recurrirá a instancias legales nacionales e internacionales para garantizar el respeto a los derechos de los trabajadores de la salud.
Las protestas han tomado fuerza en distintas ciudades. En Tegucigalpa, la capital, los manifestantes se concentraron frente al Hospital Escuela, mientras que en San Pedro Sula protestaron frente al Hospital Mario Rivas.
También se han sumado estudiantes de medicina de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), quienes exigen que la Secretaría de Salud pague puntualmente las becas de los médicos residentes.
La Asociación de Médicos Residentes (Asohmer) informó que el Gobierno transfirió fondos a la universidad, pero los pagos aún no han sido entregados. Advirtieron que las protestas continuarán hasta que se garantice el pago de los estipendios y se reincorpore a 17 residentes que fueron excluidos de la nómina. También exigen el pago retroactivo de los meses de enero a marzo de 2025.
Mientras la crisis persiste, cientos de pacientes siguen sin recibir atención médica adecuada en los principales hospitales del país.