Una sanción más. El gobierno de Estados Unidos anunció este jueves la imposición de restricciones a la importación y exportación de artículos de defensa de origen estadounidense, así como servicios de defensa destinados a o provenientes de Nicaragua.
Esta medida se enmarca en una actualización de la política comercial de defensa hacia Nicaragua por parte del Departamento de Estado estadounidense, mediante la modificación de las Regulaciones Internacionales de Tráfico de Armas (ITAR).
Según el vocero del Departamento de Estado de Estados Unidos, Matthew Miller, la Casa Blanca ha expresado profunda preocupación por la persistente represión llevada a cabo por las autoridades del régimen de Daniel Ortega y su vicepresidenta y pareja Rosario Murillo contra el pueblo nicaragüense.
Ortega-Murillo siguen negando los DDHH a los nicaragüenses. Enmendamos las Regulaciones del Tráfico de Armas p/actualizar la política de comercio de materiales de defensa hacia Nicaragua a la luz de la continua represión y abusos del régimen Ortega-Murillo https://t.co/MkcCGLdSY0
— Brian A. Nichols (@WHAAsstSecty) March 14, 2024
Según la nota de prensa, esta preocupación se acentúa tras la realización de “elecciones” que Estados Unidos considera simuladas en la costa caribeña, área habitada mayormente por individuos indígenas y afrodescendientes donde el partido de la dictadura, Frente Sandinista, se autorecetó todos los cargos.
Es importante resaltar que esta medida de restricción comercial se suma al contexto de relaciones tensas entre Estados Unidos y Nicaragua, que han experimentado un cambio significativo en los últimos años.
Antes de 2018, las relaciones militares entre ambos países mantenían una cercanía estratégica e intercambio de apoyo, logística y armamento.
Sin embargo, desde esa fecha, Nicaragua ha mostrado una inclinación hacia regímenes considerados como enemigos de Estados Unidos, tales como Irán, Rusia, Corea del Norte, China, Venezuela, Cuba, entre otros, mientras fustiga a Washington.
En respuesta a esta evolución de alianzas, Estados Unidos ha optado por utilizar todas las herramientas diplomáticas y económicas a su disposición para promover la responsabilidad del régimen de Ortega-Murillo y respaldar los derechos humanos y las libertades fundamentales del pueblo nicaragüense, en su búsqueda por un futuro más justo y próspero.
En este sentido, el Departamento de Estado ha emitido un aviso en el Registro Federal, modificando el § 126.1 de las Regulaciones Internacionales de Tráfico de Armas (ITAR), para incluir a Nicaragua como destino prohibido en el comercio de artículos de defensa.