El Ministerio de Hacienda de Costa Rica ha destapado una red de facturación falsa que involucra a 77 empresas que emitieron comprobantes ficticios por un valor total de 13.250 millones de colones (aproximadamente 25 millones de dólares), según informó este martes el ministro Nogui Acosta.
La investigación, presentada durante la rendición de cuentas anual de la cartera fiscal, reveló un elaborado esquema de evasión tributaria donde las empresas involucradas emitían facturas por servicios nunca prestados o materias primas inexistentes, con el objetivo de reducir artificialmente sus obligaciones fiscales.
“Hemos identificado un patrón donde algunas empresas, principalmente del sector servicios, registran ventas significativas sin tener actividad comercial real ni compras que respalden dichas operaciones”, explicó Acosta durante su comparecencia.
El titular de Hacienda detalló que la investigación ha puesto al descubierto una doble vertiente del fraude: por un lado, las empresas que emiten las facturas falsas y, por otro, las que las adquieren para beneficiarse de deducciones fiscales indebidas.
Paralelamente, las autoridades fiscales mantienen bajo la lupa a otras 33 empresas que han declarado cero impuestos, lo que ha levantado sospechas adicionales sobre posibles irregularidades en el sistema tributario costarricense.
“Estamos preparando la documentación pertinente para presentar estas evidencias ante el Ministerio Público”, adelantó Acosta, quien enfatizó que se buscarán acciones legales tanto contra los emisores como contra los compradores de las facturas fraudulentas.
Esta operación se enmarca dentro de los esfuerzos intensificados del Ministerio de Hacienda para combatir la evasión fiscal, un fenómeno que afecta significativamente a la recaudación tributaria del país centroamericano.