Un cargamento de 1,190 kilos de cocaína escondidos entre 335 toneladas de cartón destinado, presuntamente, al reciclaje fue incautado en el puerto de Barcelona en 14 contenedores procedentes de Guatemala, informó el lunes la Agencia Tributaria de España.
Del total de droga incautada, 990 kilos fueron localizados en una nave industrial del polígono Camarma de Esteruelas, en Madrid, convirtiéndose en la mayor aprehensión de cocaína registrada en esa comunidad en las últimas dos décadas. Las autoridades investigan a cinco personas y a la empresa responsable de importar el cartón, usada para ocultar el estupefaciente.
La operación, denominada “Shuko”, comenzó cuando se detectaron movimientos sospechosos de una empresa que importaba cartón desde México y Guatemala. Parte del cargamento era vendido a recicladoras españolas, pero varios contenedores eran desviados a una nave en Tarragona que no tenía capacidad ni condiciones para almacenarlo.
El pasado 12 de marzo, la empresa gestionó el ingreso de 14 contenedores con 500 balas de cartón, con un peso total de 335 toneladas. Agentes de la Unidad Operativa de Tarragona observaron maniobras irregulares durante la carga del material en un camión, lo que los llevó a revisar una de las balas de cartón de 670 kilos.
Al inspeccionarla, encontraron paquetes de cocaína en su interior. Las demás balas cargadas también contenían droga y compartían el mismo número de referencia. En una revisión más amplia, localizaron otras balas similares aún almacenadas, sumando inicialmente 200 kilos de cocaína.
Las autoridades coordinaron una entrega vigilada de la mercancía hacia Madrid. En la nave receptora, no apareció ningún responsable para recibir la carga. Al inspeccionar el resto de las balas, se hallaron otros 990 kilos de cocaína, alcanzando un total de 1,190 kilos escondidos en 60 de las 500 balas transportadas.
Las investigaciones continúan para determinar la implicación de los cinco sospechosos y establecer el grado de participación de la empresa importadora.