Delincuentes en Honduras están aprovechando el temor y la confusión provocados por temas de salud pública para hacerse pasar por supuestas brigadas contra el Covid-19 y dengue.
Según las autoridades estas personas se presentan en barrios y colonias, especialmente en zonas vulnerables, con mascarillas, overoles blancos y equipos falsos de fumigación, para engañar a las familias y robar dentro de sus hogares.
El caso más reciente ocurrió en la colonia San Miguel del Distrito Central, donde una familia fue víctima de robo tras permitir el ingreso de los supuestos operarios de salud.
De acuerdo con la Policía Nacional ya se investiga una posible red criminal que estaría operando en al menos tres municipios de la región utilizando vehículos sin rotulación oficial y argumentos convincentes de “desinfección gratuita”.
La Secretaría de Salud fue enfática en aclarar que no está llevando a cabo operativos domiciliarios, por más creíble que parezca su propósito. Además, instó a verificar la identidad de cualquier persona que solicite acceso al hogar y reportar cualquier actividad sospechosa al 911 o a las estaciones policiales más cercanas.
Este tipo de engaños no son exclusivos de Honduras. Durante la pandemia, varios países de Centroamérica y otras regiones del mundo reportaron casos similares, donde el miedo fue utilizado como herramienta por los criminales.
En respuesta, la Fiscalía General de la República anunció la apertura d e una investigación penal para identificar y desarticular a la estructura criminal detrás de estos hechos.
Repunte de casos de dengue
Mientras tanto el país enfrenta otra amenaza creciente: el dengue. Según reportes de la Secretaría de Salud, Honduras acumula más de 11,000 casos sospechosos de esta enfermedad, con un aumento del 6 % solo en la última semana, en un contexto donde las lluvias volverán con fuerza tras la canícula, según las alertas del Centro Nacional de Estudios Atmosférico, Oceanográficos y Sísmicos (Cenaos).
Las autoridades recordaron que las lluvias intensas favorecen la proliferación del mosquito transmisor del dengue, el Aedes Aegypti, que encuentra en recipientes y charcos de agua estancada un ambiente ideal para reproducirse.
La Secretaría de Salud advierte que los niños, adultos mayores y personas con enfermedades de base son los más vulnerables y reiteraron el llamado a eliminar criaderos en casas como primera línea de defensas.