La Sala Segunda de Mayor Riesgo ha desestimado las apelaciones presentadas por los acusados en el caso de corrupción conocido como “La Línea”, que marcó un hito en la lucha contra la corrupción en Guatemala.
Este caso, investigado por la extinta Comisión Internacional contra la Impunidad (CICIG) y la Fiscalía Especial contra la Impunidad (FECI), resultó en la condena de 19 de los 29 implicados, mientras que 10 fueron absueltos.
Entre los condenados se encuentran el expresidente Otto Pérez Molina y la exvicepresidenta Roxana Baldetti, quienes recibirán una pena de 16 años de prisión y una multa de $1.3 millones por delitos de asociación ilícita y casos especiales de defraudación aduanera.
La sentencia estableció que ambos lideraban una red que, a través de sobornos, permitía que las importaciones pagaran menos impuestos al ingresar al país.
Las juezas del tribunal confirmaron que Pérez Molina y Baldetti se beneficiaron de aproximadamente el 61% de los sobornos recaudados en el sistema aduanero, que se estima en más de $9.4 millones.

Las pruebas presentadas incluyeron llamadas intervenidas, testimonios y documentación financiera que evidenciaron su culpabilidad.
Junto a ellos, también fueron condenados otros 16 implicados, mientras que la sentencia absolvió a los exjefes de la Superintendencia de Administración Tributaria, Omar Franco y Carlos Muñoz, al no encontrarse pruebas suficientes que demostraran su participación en la estructura criminal.
La decisión del tribunal no sólo confirma las condenas, sino que también representa un paso significativo en el esfuerzo por desmantelar la corrupción en el país. Sin embargo, los acusados aún tienen la opción de presentar un recurso de casación ante la Cámara Penal de la Corte Suprema de Justicia, en un último intento por revocar la sentencia.
El caso “La Línea” no sólo destapó una vasta red de corrupción, sino que también generó un importante movimiento social que llevó a la renuncia de Pérez Molina y Baldetti, marcando un punto de inflexión en la política guatemalteca.