El presidente electo de Guatemala, Bernardo Arévalo, comenzará la ronda de diálogos que anunció con pláticas entre empresarios y las autoridades ancestrales, aunque no hay fecha para ese primer encuentro.
Voceros de Arévalo y la vicemandataria electa, Karin Herrera, dijeron que lo que busca el binomio es que prevalezcan las conversaciones para tratar de solventar la profunda crisis política y social que atraviesa el país.
El mediados será el cardenal Álvaro Ramazzini.
Arévalo, quien desde el inicio aplaudió las protestas que desde el 2 de octubre bloquean diferentes carreteras y calles del país, ha insistido en que la única salida al atolladero político es la pacífica.
Sin embargo, ha sido particularmente duro al sostener sus acusaciones contra Consuelo Porras, la fiscal general, a quien acusa de encabezar un golpe de estado.
Los bloqueos han provocado decenas de millones de dólares en perdidas al país, que ha reducido considerablemente sus exportaciones, mientras el comercio formal e informal ha paralizado gran parte de sus actividades porque los trabajadores no pueden desplazarse a sus puestos con normalidad.