En un hecho sin precedentes, la vicepresidenta de Taiwán, Hsiao Bi-khim, ofreció el viernes un discurso histórico en el Parlamento Europeo, convirtiéndose en la primera vicepresidenta en ejercicio de la isla en dirigirse al organismo legislativo de la Unión Europea.
La intervención tuvo lugar durante la cumbre anual de la Alianza Interparlamentaria sobre China (IPAC), donde Hsiao destacó que la paz y la estabilidad en el Estrecho de Taiwán son fundamentales para la prosperidad global. Asimismo, subrayó los valores democráticos compartidos entre Taiwán y la Unión Europea.
“En una era marcada por la fragmentación, la volatilidad y el auge del autoritarismo, este encuentro demuestra algo vital: las democracias, incluso a distancia, no están solas”, afirmó Hsiao.
Durante su discurso, Hsiao abordó amenazas comunes como los ciberataques y el sabotaje de cables submarinos de internet, atribuidos a China. Hizo un paralelismo con los desafíos que enfrenta Europa desde la invasión rusa a Ucrania y llamó a fortalecer la cooperación internacional en defensa, ciberseguridad, infraestructura y tecnología democrática.
También destacó el papel de Taiwán como socio estratégico en sectores clave, como los semiconductores, la inteligencia artificial y la industria farmacéutica, posicionando a la isla como un actor confiable para la resiliencia económica global.
La vicepresidenta estuvo acompañada por el canciller taiwanés Lin Chia-lung, en una gira que busca estrechar lazos con Europa, en medio del aumento de tensiones con Pekín.
China condena la visita
La respuesta de China no se hizo esperar. El gobierno chino condenó enérgicamente la visita de Hsiao, calificándola como una violación del principio de “una sola China” y una “grave injerencia en los asuntos internos del país”.
“Esto afecta la soberanía y la integridad territorial de China. Es una línea roja que no debe ser cruzada”, declaró el Ministerio de Exteriores chino, según citó el diario estatal The Global Times.
China exigió a la Unión Europea tomar medidas para “corregir el impacto negativo” de este tipo de acciones y dejar de respaldar a las fuerzas separatistas de Taiwán, al considerar que minan la confianza entre ambas potencias.
Por su parte, el presidente taiwanés, Lai Ching-te, agradeció públicamente a la IPAC por invitar a Hsiao al Parlamento Europeo:
“Taiwán es un socio confiable de la comunidad internacional y apoya con firmeza a Europa y a otros aliados en la defensa de la democracia”, escribió en sus redes sociales.
Actualmente, el único Estado europeo que mantiene relaciones diplomáticas formales con Taiwán es el Vaticano. Sin embargo, países como Lituania, Francia o Reino Unido han mostrado respaldo a Taipéi, a pesar de las objeciones de China.







