La Red de Sistemas de Alerta Temprana de Hambruna (Fews Net) advirtió que la producción agrícola en el corredor seco centroamericano será inferior este año debido a las pérdidas en el campo por los patrones erráticos del clima.
Después de un episodio de El Niño, con altas temperaturas y reducción de lluvias, a partir de septiembre se prevé el desarrollo de La Niña que genera más precipitaciones.
En un análisis para El Salvador, Honduras y Nicaragua, Fews Net, que cuenta con financiamiento de USAID, indicó que los pronósticos climáticos advierten que las condiciones cálidas y las precipitaciones irregulares continuarán, pero con acumulados por arriba del promedio hasta enero de 2025.
“Esto permitirá una producción de subsistencia de primera y de postrera levemente menor al promedio, especialmente para el segundo ciclo que tendrá mayor riesgo para la producción de frijol”, indicó Fews Net.
El ciclo agrícola en los países centroamericanos comienza tradicionalmente con el invierno, cuya producción se saca en tres etapas: primera de mayo a junio; postrera de agosto hasta el inicio de la temporada seca; y de riego o apante.

Fews Net añadió que, debido al atraso del inicio del ciclo de primera, la escasez de alimentos se extenderá hasta septiembre. Los agricultores de subsistencia en áreas del corredor seco de la región y el norte de Honduras son los más afectados, quienes han recurrido a “estrategias de respuesta negativa” para hacer frente a las pérdidas del ciclo productivo de 2023.
La red añadió que los precios de los alimentos han mantenido una tendencia alcista, a pesar de que la inflación general se ha mostrado estable en julio de 2024 respecto al mes previo.
“El rubro que mayor variación tuvo es el alimentario, que reporta aumentos de hasta nueve 9 % para el caso de Nicaragua”, señaló la institución, que también consideró que hay factores estacionales que han influido en el mercado.
El documento indica que Nicaragua ha restringido las exportaciones de granos básicos para mantener el suministro local, lo que influyó en un aumento de precios en el resto de los mercados centroamericanos.
Aunque para octubre se prevé que la inflación de alimentos disminuya, no será significativa por la influencia de los precios de otros alimentos, advirtió la red.