Tras la polémica generada por el desalojo de más de 300 familias en Santa Tecla y las protestas que le siguieron, el presidente de El Salvador, Nayib Bukele, respondió con una propuesta legislativa que ha reavivado el debate sobre el papel de las organizaciones no gubernamentales en el país: una Ley de Agentes Extranjeros, que impondría un 30 % de impuesto sobre las donaciones internacionales que reciben estas organizaciones.
“El objetivo real de estas ONG globalistas es atacar al gobierno”, afirmó Bukele en un pronunciamiento difundido este martes, donde acusó a grupos de izquierda y organizaciones extranjeras de manipular a los afectados por una sentencia judicial emitida hace más de una década.
Una protesta, una ley y un nuevo pulso político
La protesta, que se llevó a cabo frente al centro comercial Las Piletas y cerca de la residencial Los Sueños —donde vive el mandatario—, fue disuelta por la policía con detenciones incluidas. Líderes de la Asociación Cooperativa El Bosque y su asesor jurídico fueron arrestados, hecho que motivó reacciones de condena por parte de la oposición.
Ayer fuimos testigos de cómo personas humildes fueron manipuladas por grupos autodenominados de izquierda y ONG globalistas, cuyo único objetivo real es atacar al gobierno.
La presencia coordinada de medios, el acarreo evidente y los banners impresos profesionalmente lo…
— Nayib Bukele (@nayibbukele) May 13, 2025
“¿Esta es la libertad y la democracia que prometieron?”, cuestionó el diputado Francisco Lira (ARENA), quien calificó el operativo como una muestra de represión estatal. Desde el partido Vamos, la diputada Claudia Ortiz también criticó lo que llamó un uso “desproporcionado” de la fuerza.
Pero Bukele no cedió ante las críticas. Aseguró que el caso que originó el desalojo fue judicializado desde 2008, con una sentencia firme a favor del acreedor.
“Incluso fue acusado penalmente por estafa, y ganó también en esas instancias”, explicó, al tiempo que denunció que los manifestantes fueron “acarreados” y utilizados políticamente.
Impuesto para financiar la deuda
Como respuesta, el mandatario propuso que las propias ONG financien una solución al conflicto. El proyecto de Ley de Agentes Extranjeros, que será enviado a la Asamblea Legislativa, establecería un impuesto del 30 % sobre todas las donaciones que reciban ONG extranjeras, recursos que serían destinados al pago de la deuda que originó el litigio por los terrenos ocupados.
“La población no pagará por reclamos ajenos”, afirmó Bukele. “Y las ONG cumplirán, por fin, su supuesto propósito de ayudar al pueblo”.