Un padre y su hijo, de nacionalidad guatemalteca, fueron condenados en Estados Unidos por integrar una estructura de narcotráfico que operó durante años en rutas que atravesaban Centroamérica y llegaban hasta territorio estadounidense, según documentos judiciales del Tribunal del Distrito Este de Texas.
El caso involucra a Byron José Berganza Roque, conocido como “Chino”, y a su padre Byron Alcides Berganza Espina, señalados de participar en el tráfico internacional de cocaína desde Sudamérica hacia Estados Unidos.
La corte estadounidense condenó a Byron José Berganza por conspiración para fabricar y distribuir cocaína con destino a Estados Unidos, tras admitir su participación en la red criminal desde al menos el año 2017.
De acuerdo con los documentos judiciales, la droga era movilizada desde Colombia y Ecuador, pasando por Panamá, Costa Rica, Guatemala y México, una de las rutas más utilizadas por el narcotráfico hacia el norte del continente.
Berganza Roque fue capturado el 12 de noviembre de 2020 en el Aeropuerto Internacional La Aurora, en Guatemala, señalado como miembro de una organización que operaba desde aproximadamente 2008.

Aunque enfrentaba una posible condena de entre 11 y 14 años de prisión, un acuerdo de culpabilidad y su cooperación con la justicia permitieron que en julio de 2022 quedara en libertad por “tiempo cumplido”, con una multa de $100 dólares y cinco años de libertad supervisada.
Su padre, Byron Alcides Berganza Espina, de 67 años, cumple una segunda condena en Estados Unidos por narcotráfico, luego de haber retomado actividades criminales tras recuperar su libertad en 2015.
Según la investigación, el negocio familiar de tráfico de drogas habría comenzado hace más de 30 años, con base en los departamentos guatemaltecos de Izabal y Chiquimula, zonas históricamente utilizadas como puntos clave del trasiego.
Autoridades antidrogas consideran a Berganza Espina como uno de los narcotraficantes guatemaltecos más influyentes de finales de los años noventa, y señalan que durante años colaboró como informante de EE. UU., aportando datos sobre cargamentos y redes criminales en la región.







