Un juez federal de Estados Unidos que paralizó las expulsiones de presuntos criminales venezolanos a la ‘supercárcel’ en El Salvador, dictaminó que los argumentos proporcionados hasta el momento por la Casa Blanca son “lamentablemente insuficientes”.
Ante esto, exigió a la administración Trump que aclare si, como parece ser el caso, declarará esta cuestión como secreto de estado para evitar una posible comparecencia judicial.
La única respuesta recibida hasta ahora fue de Miguel Vergara, director local del Departamento de Operaciones de Control y Deportación (OCD), quien trasladó al tribunal las discusiones sobre la posibilidad de clasificar la información como secreta.
Según Vergara, esta es una cuestión de seguridad nacional que requiere una cuidadosa consideración, lo cual no puede resolverse de manera apresurada.
El juez James Boasberg está investigando si la administración Trump desafió la suspensión judicial al autorizar los vuelos con más de 250 presuntos miembros de bandas criminales, entre ellos integrantes del Tren de Aragua y maras salvadoreñas, a la conocida “supercárcel”.
Estos vuelos partieron cuando aún se estaban llevando a cabo las deliberaciones judiciales. Boasberg solicitó una declaración jurada de una persona involucrada directamente en las discusiones sobre la posible invocación del privilegio de secreto de estado y que la Casa Blanca informe antes del martes sobre su decisión.
Por otro lado, los abogados de los expulsados denunciaron que no todos los detenidos son miembros de pandillas.
Uno de los casos más destacados es el de Jerce Reyes Barrios, un futbolista profesional venezolano y entrenador de fútbol infantil, quien asegura que su tatuaje fue malinterpretado como un símbolo de pandillas, cuando en realidad es un homenaje al escudo del Real Madrid. Tras presentar pruebas, Barrios fue transferido fuera de la “supercárcel” y tiene una audiencia programada para el 17 de abril.
Mientras tanto, el Departamento de Justicia de Estados Unidos reafirmó su intención de reanudar las expulsiones tan pronto como se levante la suspensión judicial.