La Fiscalía General de la República (FGR), junto con la Policía Nacional Civil (PNC) y la Superintendencia de Regulación Sanitaria, supervisaron en El Salvador la destrucción de 1,795 kilos de cocaína incautados a 3 ciudadanos ecuatorianos. La droga fue valorada en $45,101,160.
El procedimiento se realizó en cumplimiento de una orden emitida por el Tribunal Quinto contra el Crimen Organizado de San Salvador. La cocaína había sido interceptada el 1 de octubre de 2025. Fue a 1,150 millas náuticas al sur de la Bocana El Cordoncillo, en el municipio de San Luis La Herradura, departamento de La Paz.
Operativo y captura en aguas salvadoreñas
Durante el operativo, la Marina Nacional interceptó una embarcación de bandera ecuatoriana que transportaba grandes bultos de droga. A bordo se encontraban Fabián Alexis López Reyes, Jefferson Javier Tomala Cedeño y Carlos Alfredo Macías Mero, todos de nacionalidad ecuatoriana.
Los tres fueron capturados y procesados por tráfico ilícito de drogas. En audiencia inicial, el tribunal determinó que los acusados continuarán en detención provisional mientras avanza la investigación en la etapa de instrucción.
#Antinarcóticos | Luego de verificar la droga que corresponde a la más reciente incautación ejecutada por la Marina Nacional, la @FGR_SV junto a la @PNCSV, destruyeron un total de 1,795 kilos de cocaína valorada en $45,101,106 dólares.
Los ecuatorianos Fabián Alexis López,… https://t.co/YdWKRXT3YV pic.twitter.com/0JbfFant3L
— Fiscalía General de la República El Salvador (@FGR_SV) November 4, 2025
“El proceso se encuentra en fase de instrucción formal y se están recabando las últimas pruebas antes del dictamen judicial”, indicó el fiscal del caso.
Acciones coordinadas contra el narcotráfico
El Gabinete de Seguridad presentó el 15 de octubre los resultados del operativo, destacando el trabajo conjunto de las unidades marítimas salvadoreñas en la lucha contra el narcotráfico internacional.
La destrucción del alijo confirma el compromiso del Estado salvadoreño con el combate a las redes criminales transnacionales que operan en la región del océano Pacífico centroamericano.
Con esta acción, las autoridades salvadoreñas refuerzan su política de seguridad marítima y control fronterizo. Esta política está destinada a reducir el tráfico de drogas en aguas nacionales y a proteger el territorio de actividades ilícitas.







