Dictadura de Nicaragua suspende desfile patrio por amenazas de lluvia

Régimen suspende tradicional desfile para proteger de la lluvia a los dos dictadores cuyas edades rozan los 80 años

lluvias nicaragua

La dictadura de Nicaragua suspendió el tradicional desfile patrio por amenazas de lluvia.

La dictadura de Nicaragua anunció este lunes 15 de septiembre la posposición del tradicional desfile patrio previsto en Managua, alegando advertencias del Instituto Nicaragüense de Estudios Territoriales (Ineter) sobre lluvias y tormentas eléctricas.

La dictadura emitió un comunicado en el que justificó la medida como una decisión para “proteger la salud de los participantes”.

Sin embargo, el anuncio de última hora generó críticas en sectores opositores y entre analistas que señalaron la improvisación y falta de planificación en la organización de las festividades patrias.

El desfile de la Independencia, que cada 15 de septiembre reúne a miles de estudiantes en la capital, es uno de los principales eventos cívicos del país.

Su postergación sin fecha definida dejó desconcierto entre padres de familia, docentes y alumnos que habían preparado durante semanas las presentaciones.

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El peso de la edad de los dictadores

La decisión contrasta con la tradición de realizar estas actividades incluso en condiciones adversas, lo que aumenta las sospechas de que uno de los dictadores está enfermo e incapacitado.

El comunicado oficial subraya que la “Gran Fiesta de la Juventud Patriótica Nicaragüense” se realizará en los “próximos días”, sin ofrecer detalles sobre el nuevo calendario.

Tampoco se aclaró qué pasará con los desfiles en provincias como León, Masaya o Granada, donde las alcaldías mantienen sus propios actos.

La alerta meteorológica coincide con reportes de inestabilidad climática en la región centroamericana, provocada por la zona de convergencia intertropical y el paso de ondas tropicales.

Aun así, críticos insisten en que la suspensión refleja la falta de capacidad del régimen para prever escenarios y garantizar la seguridad sin afectar la continuidad de las celebraciones patrias.

Daniel Ortega, de 79 años, y Rosario Murillo, de 74, se mantienen aferrados al poder desde 2007. Su avanzada edad y permanencia prolongada en la presidencia alimentan los cuestionamientos sobre la capacidad de liderazgo en medio de una crisis política y social que se ha profundizado en los últimos años.

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