La Comisión de Gobierno de la Asamblea Nacional aprobó este martes 28 de octubre el anteproyecto de ley que propone la cadena perpetua en Panamá para castigar los homicidios atroces. La iniciativa fue presentada por la diputada panameñista Ariana Coba, quien afirmó que esta medida busca responder al clamor de las familias de víctimas de delitos graves.
“Muchos familiares quedan con un sin sabor tras perder a un ser querido en circunstancias atroces. Tengo la capacidad de ponerme en los zapatos de quienes han vivido ese dolor”, declaró la diputada Coba durante la presentación del proyecto.
El objetivo: castigar los crímenes más atroces
Coba explicó que la propuesta surge como respuesta al aumento de los crímenes violentos en el país, citando el reciente asesinato de una joven apuñalada en un parque público de Pocrí, Aguadulce.
El anteproyecto propone reformar el artículo 52 del Código Penal, ampliando el rango de penas hasta la prisión perpetua. Además, introduce el artículo 132-C, que define los casos que podrían ameritar esta sanción.
Según el texto, se impondrá cadena perpetua en Panamá a quien cometa homicidio mediante actos de extrema crueldad, como el uso de fuego, asfixia, extracción de órganos o inmersión. También aplicará para asesinos en serie o quienes maten a dos o más personas en un mismo evento, así como para homicidios cometidos en el contexto de delitos contra la seguridad colectiva.
Diputados respaldan la medida con observaciones
Los miembros de la Comisión de Gobierno respaldaron por unanimidad la propuesta. El diputado Luis Duke apoyó la iniciativa, aunque subrayó la necesidad de analizar el hacinamiento carcelario y definir con precisión los delitos colectivos que podrían recibir penas de cadena perpetua.
El debate legislativo continuará en el pleno de la Asamblea Nacional, donde se espera un amplio intercambio de opiniones sobre el impacto de la medida en el sistema penitenciario y en la política criminal del país.
Mulino respalda la propuesta y pide aplicar penas sin reducción
El presidente José Raúl Mulino expresó su apoyo al anteproyecto, argumentando que los autores de crímenes atroces no deberían tener beneficios judiciales. “Mi sentimiento es que este tipo de gente no tiene derecho ni a vivir. Alguien que se ensaña con una persona o un niño no es un ser humano. Mi simpatía está con el proyecto”, afirmó el mandatario en su conferencia semanal.
Mulino agregó que una pena de 50 años o perpetua solo tiene sentido si no se permite la reducción de condena ni otros recursos que beneficien al agresor. “Una pena de 50 años puede compensar el dolor de las familias, pero debe cumplirse íntegra”, enfatizó.
El presidente aseguró que seguirá de cerca el avance del proyecto en la Asamblea y que evaluará con detalle su contenido antes de decidir si lo sancionará o no. “Cuando llegue a la Presidencia, lo revisaré con mucho cuidado”, concluyó.
Hacia una justicia más severa
Con la discusión de la cadena perpetua en Panamá, el país se suma al debate regional sobre el endurecimiento de las penas para delitos graves. La propuesta busca fortalecer la seguridad ciudadana, garantizar justicia para las víctimas y enviar un mensaje de cero tolerancia ante la violencia extrema.
La iniciativa continuará su trámite legislativo en los próximos días, mientras las autoridades evalúan su viabilidad jurídica y social, y las familias de víctimas expresan su esperanza en un sistema penal más firme y efectivo.







