La migración de ciudadanos nicaragüenses hacia Costa Rica alcanzó cifras récord en los primeros nueve meses de 2025, con un total de 234,856 ingresos y 211,675 salidas registradas en la frontera norte del país centroamericano, según un informe la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) y la Dirección General de Migración y Extranjería (DGME) de Costa Rica.
Los datos indican que estas cifras superan los registros de años anteriores: en 2024 se reportaron 217,000 entradas y en 2023, 200,000. Solo en septiembre, se contabilizaron 23,640 ingresos y 23,009 salidas por los puestos oficiales de Peñas Blancas y Las Tablillas.
El monitoreo también identificó 2,794 ingresos y 3,063 salidas por pasos irregulares, como Paso Rojo en Los Chiles. Esta dinámica refleja una movilidad intensa de corta distancia y de carácter bidireccional, con un promedio diario de 93 entradas y 102 salidas irregulares durante septiembre.
Las zonas de origen más comunes en Nicaragua fueron Rivas y Managua, con 20 % cada una, y Río San Juan con 13 %. En cuanto a destinos dentro de Costa Rica, San José (26 %), Liberia (13 %) y San Carlos (10 %) se mantuvieron como los principales lugares de residencia para los migrantes.
En busca de trabajo
Las principales razones para migrar fueron la búsqueda de mejores condiciones de vida (48 %), empleo temporal (28 %), reunificación familiar (20 %) y desplazamiento forzado (4 %).
Entre los trabajadores agrícolas, el 18 % fueron mujeres, y sus actividades se concentraron en zonas del norte como La Cruz, Zarcero y San Carlos, coincidiendo con el inicio de la temporada de siembra y cosecha.
El estudio también reveló una alta participación laboral entre los migrantes: el 75 % estaban empleados, cifra superior al promedio nacional del 61 %. Los sectores con mayor ocupación fueron construcción (21 %), comercio (17 %), agricultura (16 %) y servicio doméstico (13 %), con una notable disparidad entre hombres y mujeres: el 88 % de los hombres estaban empleados frente al 56 % de las mujeres.
La construcción fue el sector más representado entre quienes cruzaron por puestos oficiales, concentrando trabajadores principalmente en Liberia y San José. En cambio, la agricultura predominó entre quienes ingresaron por pasos no autorizados, especialmente en áreas fronterizas vinculadas a la economía agroindustrial.
El informe subraya la necesidad de mantener un monitoreo constante de los flujos migratorios para comprender mejor la relación entre la movilidad regular e irregular, así como los retos de integración laboral en el país de destino.
 
  
  
 







