El gobernante nicaragüense Daniel Ortega es “un dictador oportunista” que socava la democracia centroamericana, señaló el sábado el Ministerio de Relaciones Exteriores de Taiwán al reaccionar a sus declaraciones en las que etiquetó a ese país como “una provincia de China”.
La cancillería taiwanesa recordó en un comunicado que cuando Ortega regresó al poder en enero de 2007, Taiwán proporcionó programas de cooperación a Nicaragua “basados en la buena voluntad y los principios orientados al desarrollo de ayudar a los países amigos”.
“Estos programas se ampliaron incluso después de que los dos países rompieran las relaciones diplomáticas en diciembre de 2021”, agregó el comunicado.
“Ortega ha sido durante mucho tiempo descarado al aceptar cantidades significativas de ayuda para los nicaragüenses. Sin embargo, después de cambiar el reconocimiento a Beijing, Ortega y su esposa se alinearon con el autoritario gobierno chino para obtener más ayuda”, señaló Taiwán.
Ortega rompió relaciones con Taiwán tras las fraudulentas elecciones de noviembre de 2021 en las que el dictador encarceló a todos los candidatos opositores. Taiwán no felicitó a Ortega por su “triunfo”.
“Taiwán es una provincia de China, no es una República, no es un Estado, es simplemente una provincia de China, y eso está así reconocido a nivel global, aprobado por las Naciones Unidas”, dijo Ortega el viernes.

La cancillería taiwanesa además dijo que Ortega y su esposa -y vicepresidenta Rosario Murillo- “se han convertido en cómplices de los esfuerzos de la República Popular China para socavar la democracia en Centroamérica y expandir su influencia en la región”.
“Han promovido continuamente el principio de “una China”, dijo el ministerio, describiendo su comportamiento como “reprochable”.
Taiwán llegó a ser el segundo cooperante más importante de Nicaragua y su énfasis fueron los programas sociales de ayuda a los más pobres.
El Ministerio de Asuntos de la República Reiteró que Taiwán es “un país soberano e independiente” que nunca ha sido gobernado por China”.
“Este es un hecho objetivo y la realidad actual”, dijo.
El ministerio prometió que el gobierno y el pueblo taiwaneses están comprometidos con la defensa de la soberanía nacional y continuarán reforzando la cooperación con otras democracias para contrarrestar la expansión del autoritarismo.
La dictadura de Ortega es ampliamente acusada por violaciones de derechos humanos. En un informe de marzo al Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas, el Grupo de Expertos en Derechos Humanos sobre Nicaragua encontró que las “violaciones generalizadas y sistemáticas de los derechos humanos” contra los nicaragüenses han sido cometidas por grupos progubernamentales y aprobadas por Ortega y el vicepresidente Rosario Murillo.
“Han estado armando el sistema de justicia, armando la función legislativa, armando la función ejecutiva del Estado contra la población”, dijo Jan Simon, presidente del Grupo de Expertos en Derechos Humanos sobre Nicaragua. Los presuntos delitos incluyen ejecuciones extrajudiciales, detenciones arbitrarias, tortura, privación arbitraria de la nacionalidad y del derecho a permanecer en el propio país, según el informe.