Un grupo de senadores de Estados Unidos pidió al Departamento de Estado norteamericano que niegue los visados a ciudadanos guatemaltecos que hayan participado de actos de corrupción y que, además, les congele los bienes que puedan tener en ese país.
Además advirtieron que los ataques a la prensa y las persecuciones políticas contra los que un día investigaron la corrupción, son atentados directos contra la democracia.
Los demócratas Dick Durbin y Ben Cardin, representantes de Illinois; Jeanne Shaheen, de Nuevo Hampshire; y Jeff Merkley, de Oregon se unieron a Tim Kaine, representante de Virginia, y Bob Menéndez, de Nueva Jersey, para solicitar las sanciones.
“El continuo deterioro de la democracia y el estado de derecho en Guatemala es profundamente preocupante. Los esfuerzos del presidente (Alejandro) Giammattei y su gobierno para acosar y perseguir a los funcionarios del gobierno, los miembros de la prensa y las organizaciones de la sociedad civil representan un patrón alarmante de atacar a las personas que buscan erradicar la corrupción desenfrenada de Guatemala”, dice una carta que firmaron los senadores.
“Le instamos a que deje claro que la relación entre Estados Unidos y Guatemala debe permanecer basada en un compromiso mutuo e inquebrantable con la protección de la democracia y las instituciones democráticas, sin excepción”, agrega.
Los senadores también subrayan cómo la corrupción y el deterioro del estado de derecho en Guatemala amenazan con socavar los esfuerzos de los Estados Unidos para abordar las causas profundas de la migración y el tráfico de drogas.
“Mientras los altos funcionarios guatemaltecos estén involucrados en la corrupción y los esfuerzos para socavar el estado de derecho y las instituciones estatales y la delincuencia, los Estados Unidos no podrán construir una asociación productiva con el gobierno guatemalteco para abordar eficazmente las causas profundas de la migración desde el país”.
El texto hace mención a que casi 30 jueces, magistrados y fiscales han tenido que huir de Guatemala ante la persecución política desde el inicio de la presidencia de Giammattei.
“Estos ataques representan un ataque intencional y un vaciado de instituciones clave críticas para una democracia que funcione. A pesar de los avances sin precedentes contra la impunidad y la corrupción logrados a través de la CICIG antes de su cierre, los ataques del gobierno de Giammattei reflejan un esfuerzo deliberado de los líderes de Guatemala para borrar el legado de la CICIG y armar el sistema de justicia de Guatemala contra sus opositores políticos”, añade.
Piden también que el Departamento de Estado advierta a los candidatos presidenciales de Guatemala, los funcionarios gubernamentales y las organizaciones de la sociedad civil antes de las elecciones generales de junio de este año, “que la relación entre Estados Unidos y Guatemala debe seguir basada en un compromiso mutuo e inquebrantable con la protección de la democracia y las instituciones democráticas, sin excepción”.
Esto es lo que piden como castigo
- Denegar visas de los Estados Unidos a funcionarios guatemaltecos y actores del sector privado que hayan participado directa o indirectamente en actos significativos de corrupción, violación de los derechos humanos o actos que socavan los procesos o instituciones democráticas.
- Congelar los activos económicos y las tenencias en los EE. UU. Estados Unidos de funcionarios guatemaltecos y actores del sector privado que han participado directa o indirectamente en actos significativos de corrupción o abusos de los derechos humanos.