A dos años del establecimiento de relaciones diplomáticas entre Honduras y la República Popular China, tras romper con Taiwán, el analista político y exdiputado Aníbal Cálix consideró que los resultados para el país han sido poco favorables, especialmente por la falta de transparencia y planificación.
“Es difícil catalogar de positivas las relaciones diplomáticas con China, porque se le dio un manto de secretividad al decreto ejecutivo en todas las negociaciones y por ende no se pueden conocer las cosas claves del proceso”, explicó Cálix en una entrevista con Radio América de Tegucigalpa.
Uno de los sectores más golpeados, según el analista, ha sido el camaronero, que perdió su principal mercado de exportación con la ruptura del vínculo con Taiwán.
“En Honduras se ha tenido una invasión de productos chinos que generan más consumo, pero el verdadero impacto positivo se da cuando se exporta, se generan divisas y empleo”, subrayó.
Cálix también criticó la falta de análisis técnico y planificación en el establecimiento de los acuerdos con China, al considerar que las decisiones fueron más ideológicas que estratégicas.
“Los Tratados de Libre Comercio deben hacerse con tiempo, en fases, y con un verdadero análisis de cuál será el impacto y el beneficio para el país”, advirtió.

El gobierno de la presidenta Xiomara Castro ha defendido que la relación con China ha traído algunos logros en infraestructura, educación e inversión, así como convenios comerciales y donaciones.
En relación con el rubro del camarón, el canciller Eduardo Enrique Reina aseguró que China actuó con rapidez y ya permite el ingreso del producto hondureño con “medidas fitosanitarias claras” y cero arancel, gracias a un acuerdo de “cosecha temprana”.
Sin embargo, China solo ha comprado unos cuantos contenedores y la industria camaronera sigue profundamente afectada, perdiendo empleos e incluso cerrando empresas.
Taiwán compraba casi el 40% de las exportaciones hondureñas de camarón en 2022 antes que Castro decidiera romper una histórica relación de 82 años. China solo ha comprado dos contenedores en casi dos años.
Castro no solo rompió relaciones con Taiwán en marzo de 2023 sino que también renunció al Tratado de Libre Comercio con lo que perdió el ingreso libre de aranceles al mercado taiwanés que también pagaba precios preferenciales a los productores hondureños.
Las cifras entonces se desplomaron un 67% y pasaron de 20.7 millones de libras en 2022, a 20.3 millones en 2023 y a solo 6.6 millones en 2024, según cifras de la Asociación Nacional de Acuicultores de Honduras (Andah).
Sin embargo, otro efecto colateral de la ruptura con Taiwán ha sido el abandono que denuncian los estudiantes hondureños becados en la isla, quienes acusan al gobierno de no gestionar soluciones para continuar con su educación.
“Esta situación ya no es solo un problema administrativo, sino que ha puesto en riesgo nuestra educación, estabilidad y, en algunos casos, incluso nuestra salud ya que nuestros seguros médicos están ligados a nuestra inscripción en nuestras respectivas universidades”, expresa una carta pública firmada por los becarios.
La semana pasada, Honduras y China cumplieron el segundo aniversario del establecimiento de relaciones diplomáticas y ambos países firmaron un “canje de notas” para un estudio técnico preparatorio de tres proyectos en salud y agricultura, una medida que, lejos de traducirse en un compromiso real, deja claro que las promesas chinas de apoyo siguen siendo vacías e incumplidas.