La renuncia del vicecanciller de Política Exterior de Honduras, Antonio “Tony” García, provocó duras reacciones dentro del oficialismo de Libre. Altos funcionarios lo señalaron de actuar con “naturaleza traicionera” y de seguir intereses ajenos al gobierno de la presidenta Xiomara Castro.
El vicecanciller Gerardo Torres afirmó que la salida de García “es parte de una estrategia mediática en un ambiente electoral”. Lo acusó de no estar “a la altura de la confianza” que le dio la mandataria y de replicar el patrón de otros nombramientos vinculados a Salvador Nasralla que han abandonado el gabinete.
La traición es artera… https://t.co/eN8hkwjmy9
— Gerardo Torres Zelaya (@gtorreszelaya1) August 12, 2025
Torres recordó que García participó en asuntos consulares con el Gobierno de Venezuela “sin manifestar inconformidad alguna” y lamentó que la renuncia se hiciera pública. “Hay naturalezas traicioneras que nunca se superan”, advirtió, al tiempo que vinculó su salida con tensiones derivadas de la Comisión Internacional Contra la Corrupción e Impunidad en Honduras (CICIH).
A las críticas se sumó el ministro de Energía, Erick Tejada, quien cuestionó que García acudiera “primero a la prensa antes que a la Presidenta”. Calificó su gestión como “intrascendente” y advirtió que “su traición será amplificada por la oposición”. Además, lo acusó de usar su cargo para promover tráfico de influencias en un contrato de la ENEE que “nunca entró en operación comercial”.
Yendo primero a la prensa antes que a la Presidenta, asumiendo el discurso del cerco mediático, @tonygarciac deja el gobierno con más pena que gloria. Intrascendente su gestión; hoy, su traición es y será amplificada por la oposición.
Por cierto, el señor García usó su cargo… pic.twitter.com/ESWkB29tHl
— Erick Tejada Carbajal (@carbajal_tejada) August 12, 2025
Por su parte, el canciller Javier Bú Soto minimizó la renuncia, asegurando que “no pasa nada” y que continuará al frente de la política exterior.
Hay trasfondo político, dicen
El excanciller Enrique Reina también se pronunció, señalando que el “cálculo político no es lealtad” y que lo correcto habría sido presentar la renuncia directamente a la presidenta para mostrar respeto institucional.
La dimisión de García, motivada según él por “diferencias irreconciliables con el rumbo del Gobierno”, ha dejado expuestas las divisiones internas en el oficialismo. Libre lo califica de “oportunista” y “traidor”, mientras el Ejecutivo cierra filas y busca proyectar estabilidad en la política exterior hondureña.