La denuncia de un supuesto plan de fraude electoral hecha por la candidata presidencial del oficialista partido Libertad y Refundación (Libre), Rixi Moncada, provocó una rápida y enérgica reacción por parte de los partidos Liberal y Nacional, que calificaron sus declaraciones como infundadas, irresponsables y parte de una estrategia para deslegitimar el proceso electoral ante una posible derrota.
Moncada acusó públicamente a los partidos Nacional y Liberal de fraguar un fraude para las elecciones generales del 30 de noviembre, señalando directamente a las consejeras del Consejo Nacional Electoral (CNE), Cossette López (Partido Nacional) y Ana Paola Hall (Partido Liberal), como representantes de ese presunto esquema. “Se está orquestando un fraude desde el mismo órgano electoral”, denunció.
Partido Nacional: “Libre prepara un plan de desestabilización”
El Partido Nacional, a través de un comunicado oficial, rechazó las acusaciones y acusó a Libre de intentar desacreditar las elecciones para justificar su posible derrota. “Primero intentaron boicotear las primarias, ahora quieren sembrar dudas sobre las elecciones generales con un discurso peligroso de fraude liderado por Rixi Moncada”, señala el pronunciamiento.
La dirigencia nacionalista denunció también que Libre estaría impulsando una “estrategia desesperada” para mantenerse en el poder, señalando como evidencia la recolección de huellas biométricas por CONATEL, grafitis que proclaman anticipadamente la victoria de Moncada, y movilizaciones convocadas por el oficialismo. “Todo esto apunta a una proclamación anticipada al margen de la voluntad popular”, afirmaron.
Partido Liberal: “Denuncia de Moncada busca crear incertidumbre”
El Consejo Central Ejecutivo del Partido Liberal también respondió con firmeza, calificando las acusaciones de Moncada como un ataque directo a la institucionalidad democrática. “El CNE es un órgano constitucional y sus decisiones se toman conforme a la ley. Cuestionarlas de esta manera solo refleja la poca vocación democrática de Libre”, afirmó el Partido Liberal.
El Partido Liberal también denunció que Libre estaría amenazando a organizaciones de la sociedad civil que colaboran en la vigilancia electoral, y calificó como preocupantes los llamados a movilizaciones por parte del oficialismo en protesta por decisiones del CNE sobre el sistema de Transmisión de Resultados Electorales Preliminares (TREP).
Un clima político cada vez más polarizado
La controversia se da en un momento clave del proceso electoral, con menos de seis meses para los comicios generales. Mientras Libre denuncia un supuesto intento de fraude desde el CNE, la oposición señala al oficialismo por generar desconfianza en el sistema electoral y buscar controlar el proceso desde el poder.
Ambos partidos, Nacional y Liberal, coincidieron en exigir elecciones limpias, transparentes y verificables, y advirtieron que se mantendrán atentos ante cualquier intento de alterar el orden democrático o manipular la voluntad del pueblo hondureño en las urnas.