Una encuesta de CID Gallup reveló que el 90% de los salvadoreños, es decir, nueve de cada diez personas, manifiestan simpatía por Nayib Bukele y aprueban su desempeño al frente del Gobierno, una cifra que lo mantiene como uno de los mandatarios con mayor respaldo en la región.
El sondeo, que analizó distintos aspectos políticos y económicos del país, mostró además que el 88% de los consultados dijo sentirse orgulloso de su presidente, un dato clave para entender la solidez de su imagen pública.
Otro factor que explica su fortaleza es la baja identificación con los partidos políticos tradicionales. El 62% de los encuestados afirmó no tener preferencia partidaria o no saber a qué partido apoyar, lo que refuerza el peso personal de Bukele en los procesos electorales.
Entre quienes sí expresaron afinidad política, el 29% se inclinó por Nuevas Ideas, el partido oficialista, mientras que fuerzas históricas como el FMLN y Arena obtuvieron apenas un 5% y un 4% de respaldo, respectivamente.
El izquierdista FMLN gobernó el país entre 2019 y 2021 y sus dos presidentes, Mauricio Funes y Salvador Sánchez Cerén terminaron procesados y condenados por escandalosos actos de corrupción.
Por su parte el derechista ARENA gobernó El Salvador entre 1989 y 2019 y tres de sus presidentes fueron procesados por corrupción. El último, Elías Antonio Saca, cumple una condena de diez años por corrupción.

En el plano económico, las percepciones también juegan un rol importante. El 40% de los salvadoreños dijo sentirse mejor que hace un año, el 46% igual y solo el 14% consideró que su situación empeoró en los últimos 12 meses.
Las principales preocupaciones ciudadanas se concentran en temas sociales y económicos: el 28% mencionó el alto costo de la vida, seguido por la vivienda y la energía, ambos con 13%, mientras que la salud, el empleo y el acceso al agua completan la lista.
Según el gerente general de Gallup, Luis Haug, el estudio confirma que el 90% de la población tiene una opinión positiva del presidente y apenas un 5% una visión negativa, un respaldo que también se proyecta hacia la posible reelección de Bukele en las elecciones previstas para febrero de 2027, tras la aprobación de la reelección indefinida en El Salvador.








