El exrector nicaragüense Adrián Meza, exiliado en Costa Rica desde 2022, denunció el sábado que un desconocido intentó ingresar al condominio donde reside en San José bajo el pretexto de entregarle “su vehículo reparado”.
El académico relaciona el incidente con una “operación de verificación y localización del objetivo” similar a las empleadas para rastrear opositores.
En una carta abierta dirigida a los jefes de inteligencia militar y a la pareja dictatorial de Daniel Ortega y Rosario Murillo, Meza relató que “el cuerpo de vigilancia me informó que un desconocido solicitaba entrar al núcleo de viviendas dando mi nombre y número de casa. Los vigilantes no le permitieron el acceso y desapareció al notar que se me había informado”.
El catedrático, abogado y fundador de la Universidad Paulo Freire de Nicaragua —confiscada por el régimen Ortega-Murillo— señaló que toma el hecho con seriedad al recordar los “siete asesinatos políticos transfronterizos” atribuidos al gobierno nicaragüense, entre ellos el del disidente Roberto Samcam, exoficial del Ejército, asesinado a tiros el 19 de junio de 2025 en San José.
En su misiva, Meza cuestionó a Ortega y Murillo: “¿Qué sentido tiene continuar la matanza de dirigentes opositores fuera de Nicaragua, si eso solo profundiza el aislamiento del régimen y lo hace aún más impresentable ante la comunidad internacional?”. El académico sostuvo que “ni el asesinato ni la represión silencian las voces del exilio”, pues siempre surgen nuevas con “renovada indignación y sed de justicia”.
Meza, con especialidad en Derecho Laboral y Maestría en Docencia Universitaria y Derecho Ambiental, con más de tres décadas dedicado a la docencia universitaria, reiteró que no responderá con violencia.
“Yo no voy a comprar una pistola para defenderme en las calles de San José o en mi propia casa… Los refugiados y exiliados no tenemos el derecho de convertir las calles del país que nos ha acogido en un campo de batalla”, escribió Meza.
El exrector nicaragüense concluyó su carta con un mensaje de firmeza: “Cada quién es dueño de su propio miedo… seguiré cargando con el mío sin dejar de hacer lo que creo que debo de hacer por mi país”.