El gobierno de República Dominicana anunció este martes que no invitará a Cuba, Nicaragua y Venezuela a la Décima Cumbre de las Américas, programada para diciembre en Punta Cana. La decisión, comunicada por la cancillería dominicana, justifica la inclusión en criterios multilaterales y busca garantizar la mayor participación posible de Estados miembros.
“Al asumir la presidencia pro témpore en 2023, el Gobierno dominicano anunció que la Décima Cumbre sería inclusiva, propósito que procuramos honrar. Sin embargo, frente al contexto actual de polarización política, hemos decidido priorizar el éxito del encuentro… En ese sentido, la no invitación a Cuba, Nicaragua y Venezuela constituye la decisión que, dadas las circunstancias hemisféricas, favorece la mayor convocatoria y asegura el desarrollo del foro”, señaló el comunicado oficial del gobierno de Luis Abinader.
La cancillería precisó que, aunque estos países quedan fuera de la Cumbre de las Américas —en gran parte porque no forman parte de la OEA y tampoco participaron en la edición pasada—, las relaciones bilaterales mantienen particularidades.
Según la cancillería dominicana, con Cuba, dijo, existen vínculos históricos, sólidos y mutuamente beneficiosos; con Nicaragua, la relación es cordial en foros como el SICA y la CELAC; y con Venezuela, aunque los lazos son profundos, el gobierno dominicano no ha reconocido la legitimidad de sus últimas elecciones y las autoridades de Caracas suspendieron las relaciones diplomáticas.
La Cumbre de las Américas, lanzada en 1994 por Estados Unidos y coordinada actualmente por la Organización de Estados Americanos (OEA), establece limitaciones específicas en cuanto a la participación. El gobierno dominicano subrayó que su objetivo es asegurar el más amplio diálogo político con el mayor nivel de representatividad hemisférica.
La cancillería recordó que en otros espacios multilaterales, como la Cumbre Iberoamericana de 2023 en Santo Domingo o la CELAC de 2017 en Bávaro, Cuba, Nicaragua y Venezuela sí fueron invitados y participaron plenamente. Esta vez, dijo, el reto de organizar la Cumbre de las Américas exige actuar en función del interés de la mayoría de países miembros.







