La Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos (USCCB, por sus siglas en inglés) aprobó el miércoles un “Mensaje Pastoral Especial” que denuncia el creciente clima de temor, la retórica deshumanizante y las deportaciones masivas contra inmigrantes, al tiempo que llama a una urgente reforma del sistema migratorio estadounidense.
Con 216 votos a favor, cinco en contra y tres abstenciones, los obispos ratificaron por amplia mayoría un documento que —sin mencionar directamente al gobierno del presidente Donald Trump— critica duramente la política migratoria actual, marcando la primera vez en doce años que se emite un pronunciamiento de este tipo.
“Nos entristece el estado del debate actual y la estigmatización de los inmigrantes. Nos inquietan las condiciones en los centros de detención y la falta de acceso a la atención pastoral”, señala el documento, leído durante la asamblea plenaria celebrada en Baltimore, Maryland.
Los obispos católicos recuerdan que la dignidad humana y la seguridad nacional “no están en conflicto”, y que ambos valores pueden garantizarse si existe voluntad política.
“Nos oponemos a la deportación masiva indiscriminada. Oramos por el fin del discurso deshumanizante y la violencia, ya sea dirigida a inmigrantes o a las fuerzas del orden”, agregaron.
El texto también ofrece respaldo a las familias inmigrantes: “A nuestros hermanos y hermanas inmigrantes, estamos con ustedes en su sufrimiento. ¡No están solos!”, proclamaron, citando las enseñanzas bíblicas sobre la acogida al extranjero.
El mensaje pastoral, aprobado con aplausos sostenidos al final de la votación, fue calificado como una “voz de esperanza” en medio de la crisis migratoria.
“La enseñanza de la Iglesia se basa en la preocupación fundamental por la persona humana, creada a imagen y semejanza de Dios”, recordaron los obispos.
El mensaje concluye invocando la protección de la Virgen de Guadalupe sobre todas las familias migrantes y reafirma el compromiso del episcopado con una solución humana y justa para millones de personas que hoy viven en la incertidumbre.







