El huracán Melissa se intensificó el lunes a categoría 5, la máxima en la escala Saffir-Simpson, y se aproxima a Jamaica con pronósticos de lluvias e inundaciones “catastróficas”. El fenómeno, que ya provocó muertes en Haití y República Dominicana, avanza lentamente sobre el Caribe, lo que aumenta el riesgo de daños severos en su trayectoria.
Según el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (NHC), Melissa registra vientos sostenidos de hasta 260 kilómetros por hora y se desplaza a solo 5 kilómetros por hora. Su movimiento lento podría mantener las condiciones extremas durante varios días en zonas del Caribe central, generando aguaceros de hasta un metro de lluvia y deslizamientos de tierra en áreas vulnerables.
Las autoridades de Jamaica emitieron órdenes de evacuación obligatoria en zonas costeras y cerraron el aeropuerto internacional de Kingston, además de los puertos marítimos. “No se puede apostar contra Melissa”, advirtió el ministro Desmond McKenzie, al instar a la población a refugiarse antes de la llegada del ciclón. Se prevé que el impacto directo ocurra en la madrugada del martes.
En República Dominicana, el centro de operaciones de emergencia mantiene a nueve provincias en alerta roja por el riesgo de desbordes y deslaves. Ya se registraron al menos cuatro muertes: un hombre arrastrado por una corriente y tres fallecidos en Haití por derrumbes. Las lluvias continúan afectando comunidades rurales, donde las viviendas han quedado inundadas y sin energía eléctrica.

Meteorólogos del NHC advirtieron que la combinación de lluvias intensas, marejadas ciclónicas de hasta cuatro metros y vientos destructivos provocará daños severos a la infraestructura y los servicios básicos. “Las condiciones se deteriorarán muy rápidamente. No salga después del atardecer”, dijo el subdirector del NHC, Jamie Rhome.
Tras impactar Jamaica, se espera que Melissa avance hacia el este de Cuba y continúe afectando con lluvias a Haití y República Dominicana. Es la decimotercera tormenta con nombre de la temporada de huracanes del Atlántico, que se extiende hasta noviembre. El último huracán de gran intensidad en Jamaica fue Beryl, en julio de 2024, que dejó al menos cuatro muertos y daños severos en la isla.








