Nicaragua y Honduras son el primer y el tercer proveedor más importante de camisetas en el mercado estadounidense, una ventana de oportunidad para ambas naciones centroamericanas en el contexto de la guerra comercial que el presidente Donald Trump ha emprendido contra los socios comerciales más grandes.
De acuerdo con datos recopilados por Fibre2Fashion, un portal especializado en la industria textil, en 2024 las exportaciones nicaragüenses hacia la gran economía del mundo sumaron $620.80 millones en concepto de camisetas de algodón, monos y chalecos.
En el top 5 también está Bangladesh, con $537.42 millones, seguido de Honduras, con $517.95 millones, y la India, con $432.3 millones. Entretanto, Vietnam representa $315.8 millones y China $311.1 millones.
“Dado el panorama competitivo, países como Nicaragua, Bangladesh y Honduras tienen un papel importante en la configuración de las importaciones estadounidenses de estos productos”, matiza Fibre2Fashion.
La baja participación de China, un gigante de la industria textil mundial, es porque centra sus esfuerzos en otras prendas de vestir, a pesar de la popularidad de las camisetas de algodón entre los estadounidenses que viven en una moda rápida.
El portal sostiene que la ventaja comparativa revelada (VCR) de Nicaragua es de 88.54, por lo que ocupa una “posición de mando”. Este indicador de comercio internacional mide la ventaja de un país en una clase de bien, donde China apenas tiene 0.46 y Honduras 60.70.
Nicaragua tiene además una unidad de valor real (UVR) de $10.33 por kilogramo, que coloca los productos en el rango de precios medio, aunque China reporta una UVR de $9.09 y Honduras de $11.80.
“Honduras opera en un rango de precios ligeramente más alto, atendiendo a un segmento de mercado más premium. El país goza de un acceso libre de aranceles al mercado estadounidense, proporcionando una ventaja competitiva significativa sobre los exportadores que se enfrentan a mayores barreras arancelarias”, añade el portal.
A la luz de una guerra comercial emprendida por Trump, Fibre2Fashion consideró que tanto Nicaragua como Honduras tienen una oportunidad de aprovechar el posible desplazamiento de China como proveedor de Estados Unidos.
Desde su regreso a la Casa Blanca, el 20 de enero de 2025, Trump ha generado agitación en el mercado por su indecisión de aplicar aranceles. En la lista de represalias está México y Canadá, porque los acusa de no controlar la migración y el tráfico de drogas, mientras que a China le ha elevado tasas para casi todos los productos procedentes del gigante asiático.
Sin embargo, Nicaragua no tiene el camino tan fácil después de que en enero de 2025 las empresas de textil de capital estadounidense ubicadas en el país centroamericano interpelaron que el régimen de Daniel Ortega ofrece privilegios a las textileras chinas.
En una investigación de la Oficina del Representante Comercial de Estados Unidos (USTR), el gigante textilero Milliken & Company afirmó que las empresas estadounidenses se han visto perjudicadas por los privilegios que otorga la dictadura de Managua para el ingreso de productos elaborados en cuestionadas condiciones laborales en China.
Nicaragua también es acusada de enviar productos elaborados con algodón de Xinjiang, una región en China censurada por EE.UU. En 2023, la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) detuvo seis embarques que dieron positivo a las pruebas.