La banca colombiana continúa expandiéndose con fuerza en Centroamérica, donde alcanza participaciones que van del 17.4 % hasta el 50 % del mercado de crédito, según datos de la Secretaría Ejecutiva del Consejo Monetario Centroamericano (Secmca).
El estudio, publicado en marzo de 2025, analiza la estructura bancaria en Centroamérica y República Dominicana (CARD) y cómo esta incide en las decisiones de política monetaria de los bancos centrales para suavizar ciclos económicos y resguardar la estabilidad financiera.
La investigación advierte que los cambios en las tasas de interés de la Reserva Federal de Estados Unidos, tras un ciclo de alta inflación, podrían impactar en la cartera de préstamos regional. El grado de exposición depende, en buena medida, de la participación de bancos internacionales y de su acceso a financiamiento en dólares.
En este escenario, dos grandes jugadores destacan en el tablero financiero centroamericano: la banca colombiana y la hondureña.
Colombia toma ventaja
La banca colombiana se ha consolidado como el actor extranjero más influyente en la región, con una participación de hasta un 50 % en la cartera de créditos del mercado salvadoreño.
En Nicaragua presenta un 28.4 %, mientras que en Honduras un 23.7 %, en Costa Rica un 26.6 % y en Guatemala un 17.4 %.
Entre sus protagonistas figura Grupo Cibest, división creada en 2025 para centralizar las operaciones de Bancolombia en la región, que incluye Banco Agrícola (El Salvador), Banistmo (Panamá) y Banco Agromercantil (Guatemala). A ello se suma Davivienda, del Grupo Bolívar, con presencia en El Salvador, Honduras y Panamá, donde concentra un 9.1 % del mercado.
La banca hondureña responde
El contrapeso lo ofrecen los grupos hondureños, que dominan con fuerza su mercado interno, alcanzando un 68.5 % de participación de la cartera de créditos en Honduras, gracias al posicionamiento de de Inversiones Cuscatlán Centroamérica –creada a través del holding hondureño Imperia Intercontinental S.A., así como el Grupo Financiero Atlántida y Grupo Ficohsa.
Estos conglomerados han llevado su expansión más allá de Honduras. En 2024, Cuscatlán cerró operaciones relevantes en seguros, hipotecas y banca en Guatemala, El Salvador y Panamá. Ficohsa, por su parte, adquirió en El Salvador a la aseguradora Asesuisa, hasta entonces propiedad de Sura (Bancolombia).
Con estos movimientos, la banca de capital centroamericano alcanzó un 31.9 % del mercado de créditos en El Salvador, cifra que integra tanto a los bancos de origen hondureño como a BAC Credomatic, de capital nicaragüense.