A pesar de choques adversos, la economía salvadoreña creció a un ritmo robusto el año pasado, sin embargo, las vulnerabilidades aumentaron, el crecimiento se moderará y la deuda sigue siendo elevada, esas son las conclusiones de una misión del Fondo Monetario Internacional (FMI), que visitó El Salvador entre el 30 de enero y el 8 de febrero.
La misión, encabezada por. Raphael Espinoza, recomienda además, una gobernanza sólida, transparencia fiscal y rendición de cuentas son fundamentales para mejorar la gestión de los recursos, reducir los costos de financiamiento y fortalecer la confianza.
El FMI señala que las políticas para reforzar el crecimiento a mediano plazo son piezas claves del plan económico del gobierno. El informe reconoce que hay reformas para subir el crecimiento potencial dirigidas a la mejora de la seguridad (Plan Control Territorial), la diversificación de la economía (por ejemplo, mediante la promoción del turismo a través de Surf City), la reducción de los costos del comercio y la disminución del tiempo necesario para realizar trámites administrativos. Además, señala que el gasto en educación ha aumentado (de 3.6 a 5.0 por ciento del PIB entre 2019 y 2022) y se están realizando esfuerzos para desarrollar las habilidades digitales de los ciudadanos mediante la asociación con empresas Fintech.
“A pesar de choques adversos, la economía salvadoreña creció a un ritmo robusto el año pasado. Se estima que la economía creció 2.8 por ciento en 2022, impulsada por la demanda interna”, dice el informe que reconoce que desde marzo de 2022, la reducción sin precedentes de la delincuencia y los fuertes ingresos por remesas y turismo han contribuido a la robusta dinámica de la actividad y la inversión. El FMI registra la inflación anual promedio en 7.2% el año pasado.
Sin embargo, el FMI señala que “las vulnerabilidades aumentaron en 2022” y estima que el déficit de cuenta corriente creció hasta alrededor del 8 por ciento del PIB, debido al debilitamiento de los términos de intercambio y al crecimiento del volumen de las importaciones.
“Con el pago de un eurobono en enero de 2023, los diferenciales del EMBI han seguido bajando, pero el Ministerio de Hacienda sigue careciendo de acceso a los mercados internacionales de capitales”, señala el informe.
Crecimiento
El FMI proyecta que el crecimiento se modere y se mantengan los desequilibrios macroeconómicos.
“Se prevé que el PIB real crezca un 2.4 por ciento en 2023, por arriba de su promedio histórico, impulsado por el consumo privado, la inversión pública y el turismo, con una inflación anual promedio moderándose hasta el 4.1 por ciento, debido al descenso de los precios mundiales de las materias primas”, proyecta el FMI
Además, señala que los riesgos para las perspectivas son elevados y se inclinan hacia la baja.
“Por el frente externo, una desaceleración marcada en Estados Unidos podría perjudicar las exportaciones y las remesas, especialmente si se ralentiza el mercado laboral estadounidense. Una caída de los flujos de capital privados netos podría forzar a una mayor corrección de la cuenta corriente, con implicaciones negativas para el crecimiento. En el plano interno, las desviaciones sobre las políticas públicas podrían debilitar la confianza de los inversores y choques de liquidez podrían frenar el crédito al sector privado y el crecimiento. No pueden descartarse choques debidos al cambio climático y a otras catástrofes naturales. En el plano al alza, la mejora de la situación de seguridad podría dar un impulso mayor de lo previsto a la inversión privada y al crecimiento, reducir la emigración y fomentar el retorno de migrantes”, subraya la misión del organismo.
Elevada deuda
Aunque el informe reconoce que la deuda pública ha descendido hasta el 77 por ciento del PIB en 2022, advierte que “sigue siendo elevada y se encuentra en una senda insostenible” y pide que siganlos esfuerzos para lograr su sostenibilidad en el mediano plazo.
“En este contexto, es necesaria una consolidación fiscal inclusiva y favorable al crecimiento, respaldada por medidas estructuralmente sólidas que asciendan a alrededor de 3½ por ciento del PIB en los próximos tres años, que impulse la confianza del mercado y proteja el gasto prioritario en lo social y en infraestructuras”, señala el reporte.
Sector Financiero y bitcoin
El FMI elogia al sector bancario y dice se mantiene saludable, pero se requieren medidas oportunas para reestablecer los colchones de estabilidad financiera.
Pero advierte que lzos riesgos del Bitcoin deberían ser abordados. El FMI reconoce que “si bien los riesgos no se han materializado hasta el momento debido al limitado uso de Bitcoin —como sugieren datos de encuestas y remesas— su uso podría crecer dado su estatus de moneda de curso legal y las nuevas reformas legislativas para fomentar el uso de cripto activos, incluyendo bonos tokenizados (Ley de Activos Digitales).
“En este contexto, persisten los riesgos subyacentes a la integridad y estabilidad financieras, la sostenibilidad fiscal y la protección del consumidor, y las recomendaciones del informe anterior siguen siendo válidas. Mayor transparencia sobre las transacciones del gobierno en Bitcoin y la situación financiera de la billetera estatal ( Chivo) sigue siendo esencial, especialmente para evaluar las contingencias fiscales subyacentes y los riesgos de contraparte”, indica el FMI que pide evitar la financiación de compras de Bitcoin mediante la emisión de valores tokenizados.