Costa Rica participó por primera vez en la feria internacional Semicon Taiwán 2025, uno de los encuentros más importantes de la industria de los semiconductores en el mundo.
El evento reunió a más de 1,200 empresas de 56 países y atrajo a unos 100,000 visitantes, consolidándose como el foro clave para la innovación tecnológica y el fortalecimiento de cadenas de suministro en el sector.
La delegación costarricense, encabezada por la agencia estatal de inversiones Procomer, buscó posicionar al país en el ecosistema global de chips y atraer nuevas inversiones que impulsen la creación de empleos de calidad.
“Procuramos posicionar más a Costa Rica en este ecosistema y atraer inversión y empleos para los costarricenses”, destacó Manuel Tovar, ministro de Comercio Exterior.
Costa Rica, que rompió relaciones diplomáticas con Taiwán en 2007, ha retomado en los últimos meses un acercamiento en áreas de inversión y seguridad, motivado por la baja penetración comercial de China y el interés en diversificar socios estratégicos.
El propio presidente Rodrigo Chaves ha marcado distancia con Pekín y cuestionado a empresas como Huawei por prácticas que calificó de poco transparentes.
La Feria Semicon 2025
La feria Semicon 2025 tuvo una escala inédita con 17 pabellones nacionales, entre ellos Costa Rica y, por primera vez, una delegación africana. También asistieron representantes de Estados Unidos, Alemania, Japón, India, Francia, Países Bajos, Polonia y República Checa, país que envió a su ministro de Ciencia e Innovación en la primera visita ministerial a Taipéi en décadas.
El encuentro se desarrolló bajo el lema “Liderar con colaboración, innovar con el mundo”, con un fuerte énfasis en alianzas internacionales, soberanía tecnológica y cooperación científica.
Taiwán aprovechó la cita para reforzar su liderazgo global en la industria, a través de Taiwan Semiconductor Manufacturing Company (TSMC), y proyectarse no solo como un fabricante, sino como un arquitecto de plataformas de innovación y diplomacia tecnológica.
Para Costa Rica, su debut en Semicon representa un paso estratégico para insertarse en una de las industrias más dinámicas del mundo, en un momento donde los semiconductores definen no solo la economía digital, sino también la seguridad nacional y la competitividad global.