Centroamérica enfrenta un incremento sostenido en los intentos de fraude digital, con más de 27.1 millones de ataques de phishing registrados en el último año, de acuerdo con el Panorama de Amenazas para América Latina de Kaspersky.
La cifra forma parte de los más de 1,200 millones de ataques reportados en América Latina, lo que equivale a un promedio de 3.5 millones de intentos diarios.
Según el informe, Costa Rica fue el país más afectado al acumular 7.9 millones de ataques en 12 meses, un promedio de 21,000 eventos diarios.
Le sigue Guatemala con 6.4 millones y Panamá con 6.3 millones, un promedio de 17,000, respectivamente.
República Dominicana contabilizó unos cuatro millones, con un promedio de 11,000 ataques por día, mientras que El Salvador registró 2.5 millones, 7,000 diarios.
La emoción, la principal arma para los ataques
La mayoría de estos ataques inicia con tácticas que parecen inofensivas a través de ofertas falsas, notificaciones atractivas o mensajes que simulan ser de comercios y servicios reconocidos.
Redes sociales, correos electrónicos y mensajes instantáneos son los canales más usados por los estafadores, quienes aprovechan el impulso emocional de la compra o el temor a perder un pedido para desviar al usuario a sitios falsos.
El estudio de Kaspersky indica que la mitad de los latinoamericanos ya ha caído en trampas de este tipo; en Centroamérica, Guatemala registra un 54 % de víctimas, Panamá un 53 % y Costa Rica un 52 %.
El impacto económico también es significativo, pues el 29 % de quienes han sufrido fraude en América Latina perdió entre $100 y $500 al comprar en línea. Una de las principales preocupaciones es que seis de cada diez personas en la región no pueden distinguir entre un sitio real y uno fraudulento.
En la segunda fase del fraude, cuando el usuario ya ha ingresado sus datos personales o financieros, el ataque se convierte en un robo directo de dinero. Según Kaspersky, el 37 % de las víctimas en Guatemala han sido defraudadas a través de cuentas o tarjetas bancarias, seguido de Costa Rica con un 34 % y Panamá con un 21 %.
Kaspersky advierte que esta tendencia se intensifica durante temporadas de alto consumo, como Black Friday, cuando los atacantes replican comercios, servicios de entrega y bancos para captar la mayor cantidad posible de información.
Carolina Mojica, gerente de Productos del Consumidor para América Latina en la compañía, destacó que el phishing se ha consolidado como un modelo de ataque masivo, automatizado y rentable para los delincuentes, por lo que la protección “empieza con cautela desde el primer clic”.







