Centroamérica perdería más de 9.32 millones de empleos en la próxima década por el desplazamiento de carreras con la inteligencia artificial (IA), advirtió un estudio del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
Además de hacer imágenes y reconocimiento de voz, la IA permite la realización de muchas tareas que actualmente son desempeñadas por los seres humanos, como administradores, contadores, especialistas financieros o abogados, pero el futuro es incierto para estas profesiones, así como lo fue en su momento para los oficios de relojeros, telefonistas o carteros.
En el estudio, el BID utilizó el Índice de exposición ocupacional generado por IA para evaluar la probabilidad de cuántos empleos serían desplazados con la incorporación de la “automatización de tareas y factores contextuales como restricciones sociales, éticas y regulatorias”.
A partir de las simulaciones, el BID encontró que en Centroamérica habría más de 5.93 millones de empleos expuestos solo este año por el desarrollo de la IA, una cifra que aumentaría a 8.05 millones dentro de cinco años y superaría los 9.32 millones en la próxima década.
“Ocupaciones como apoyo administrativo, producción y ventas son las más expuestas debido a que son tareas predecibles que la IA puede automatizar, como la entrada de datos y la gestión de inventarios. En contraste, roles que requieren habilidades físicas complejas, decisiones críticas o elementos profundamente humanos —como bomberos, cirujanos, sacerdotes y atletas— muestran la menor exposición”, señaló el BID en el informe.
El multilateral calcula que aproximadamente 84 millones de empleos están expuestos en América Latina y el Caribe a lo largo de la próxima década, de los cuales Centroamérica representaría un 11 %. Al considerar a nivel mundial, el BID señaló que están en riesgo 132 millones de puestos de trabajo, donde la región ocupa un 7 %.
“Estrategias focalizadas, como programas de recalificación y mejora de habilidades, son esenciales para los trabajadores en ocupaciones con alta exposición a la IA. Las instituciones educativas deben priorizar habilidades menos susceptibles a la automatización y alinear sus programas de estudio con las demandas cambiantes del mercado laboral”, sostuvo el BID en su reporte.
Vistazo regional
El uso de la IA favorecería a las empresas, sin embargo socavaría el débil mercado laboral de la región donde prevalecen altos índices de informalidad y bajos salarios, con un sistema educativo rezagado con el desarrollo de las tecnologías.
Las emociones humanas son clave para la toma de decisiones, algo que la #InteligenciaArtificial, que “lo ha leído todo, pero no ha vivido nada”, no puede replicar. Así lo explicó @cristinagarmend, presidenta @Cotec_Innova, durante el seminario: “Innovación para el impacto:… pic.twitter.com/F9cZPanktD
— Banco Interamericano de Desarrollo (@el_BID) April 16, 2025
Guatemala sería la economía más afectada con el desplazamiento de empleos por la IA, pues tendría un 36 % de los puestos de trabajo expuestos al uso de las tecnologías para la próxima década, mientras que Panamá tendría el menor impacto, con un 9.1 %.
El BID detalló que Guatemala tiene un poco más de 2.18 millones de empleos expuestos para el próximo año, que luego suben a 2.96 millones en los siguientes cinco años hasta llegar a los 3.42 millones en una década.
Honduras, que ya enfrenta graves carencias en el mercado de trabajo por la alta informalidad, podría perder 1.03 millones de empleos en un año, 1.4 millones en cinco años y 1.6 millones en 10 años.
El Salvador tiene en riesgo 825,076 este año, una cifra que subirá a 1.29 millones en la próxima década, al igual que Nicaragua que subiría de 747,216 empleos expuestos a un poco más de 1.17 millones.
En el caso de Costa Rica, el BID estima que existe riesgo para 605,907 empleos este año, 822,302 en los siguientes cinco años y 952,139 dentro de 10 años.
Panamá pasaría de 542,463 a 852,441 empleos en riesgos en la próxima década.