El presidente del Banco de Guatemala (Banguat), Álvaro González Ricci, advirtió el lunes que el conflicto armado entre Israel e Irán podría impactar negativamente en la economía guatemalteca si se generan disrupciones en el suministro internacional de petróleo.
“Puede tener influencia. Hay que recordar que la variable que más incide en la inflación es el precio de los combustibles. Para este año se espera un valor promedio de $65 por barril, pero si los conflictos geopolíticos provocan escasez, eso presionaría al alza la demanda y, por ende, los precios”, explicó González Ricci.
Aunque calificó el escenario como temporal, señaló que un escalamiento bélico en Medio Oriente sí podría provocar aumentos en los costos de transporte de personas y mercancías, “y eso inmediatamente empieza a generar cierta inflación”.
El funcionario recordó que Guatemala dispone de una reserva petrolera de 90 días, lo cual brinda un margen de maniobra ante una crisis prolongada, pero enfatizó que una extensión del conflicto más allá de ese período podría tener efectos adversos. “Estados Unidos ya intervino, está pidiendo un cese al fuego y negociaciones. Claramente tenemos el deseo de que eso se logre”, apuntó.
Además, subrayó que el precio del crudo no reacciona de forma inmediata, debido a la existencia de inventarios globales y a que el 50 % del precio de la gasolina corresponde a refinamiento, lo cual amortigua variaciones iniciales.
Por su parte, el gerente económico del Banguat, Johnny Gramajo, sostuvo que los conflictos en Medio Oriente han sido una constante latente con potencial de afectar los precios energéticos. “Particularmente se empieza a temer que los suministros puedan interrumpirse, lo que podría provocar escasez a nivel mundial”, señaló.
Gramajo indicó que el precio observado actualmente es de $73 por barril, mientras que el promedio en lo que va del año es de $67. De mantenerse la tensión política, advirtió, los precios del petróleo podrían elevarse en los próximos meses.