Michelle Soto, de 27 años, conducía un pick-up modelo 2026 recién adquirido. El vehículo fue interceptado en el kilómetro 61, caserío Los Lirios, aldea Masagua y allí, frente a la escuela donde trabajaba como docente, ocurrió el ataque.
Fiscales del Ministerio Público levantaron 16 casquillos de bala en el lugar. Testigos aseguran que los disparos se efectuaron con precisión, lo que hace pensar a las autoridades en un ataque planificado y ejecutado con seguimiento previo.

Videos de vigilancia muestran cómo dos individuos a bordo de una motocicleta negra tipo Pulsar siguieron a la víctima hasta un punto con poca afluencia de vehículos y peatones y fue allí donde le cerraron el paso y dispararon a quemarropa.
El informe preliminar del Ministerio Público apunta a un móvil personal. Las diligencias sugieren que una mujer habría contratado a los sicarios, posiblemente motivada por una relación sentimental conflictiva en la que Michelle estaría involucrada. “Por problemas personales, ordena darle seguimiento y ocasionarle la muerte”, señala el documento oficial.
Soto fue trasladada de emergencia al Hospital Nacional de Escuintla, pero falleció minutos después. Los Bomberos Municipales Departamentales confirmaron que la hallaron en estado crítico dentro del vehículo, con múltiples impactos de bala.
Una vida de múltiples facetas
Además de su labor como docente, Michelle era maquillista profesional y emprendedora en el ámbito estético. Había participado como candidata a Señorita Masagua 2024 y era reconocida por su carisma y espíritu de superación. En redes sociales compartía mensajes de gratitud y esperanza, el último de ellos dedicado al estreno de su nuevo vehículo.
La noticia provocó un fuerte impacto en Masagua. El alcalde Nelson Marroquín expresó públicamente su pesar y describió a la joven como “luchadora, emprendedora y ejemplo para muchos”. La investigación continúa abierta, mientras la comunidad exige justicia por un crimen que, por sus características, resuena más allá de las fronteras guatemaltecas.