La Federación Nicaragüense de Béisbol (Feniba) anunció esta semana que el histórico mánager estadounidense Dusty Baker será el director de la selección nacional que disputará el Clásico Mundial de Béisbol 2026.
Según la prensa especializada, se trata de un punto de inflexión para el béisbol nicaragüense, que por primera vez contará con un estratega de prestigio mundial al frente de su equipo.
Baker, de 76 años, es el octavo dirigente con más victorias en la historia de las Grandes Ligas y uno de los trece con más de 2,000 triunfos.
Tres veces Mánager del Año de la Liga Nacional, dirigió durante 26 temporadas a cinco equipos distintos –Gigantes de San Francisco, Cachorros de Chicago, Rojos de Cincinnati, Nacionales de Washington y Astros de Houston– llevando a todos a ganar al menos un título de división.
El mánager anunció su retiro en 2023, tras conquistar la Serie Mundial con los Astros en 2022, un logro que lo convirtió en el estratega de mayor edad en obtener ese título, a los 73 años.
También fue el primer afroamericano en superar las 2,000 victorias en Grandes Ligas, consolidando su legado en la historia del béisbol.
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Un reto histórico para Nicaragua
Nicaragua disputará apenas su segundo Clásico Mundial, tras haber debutado en 2023, cuando terminó en el puesto 19.
La novena centroamericana logró el boleto al torneo de 2026 luego de vencer a Taiwán 6-0 en el clasificatorio y cerrar con récord invicto de 3-0.
El combinado pinolero integrará el Grupo D, que se jugará del 6 al 11 de marzo en el loanDepot park de Miami, casa de los Marlins, y tendrá como rivales a República Dominicana, Venezuela, Países Bajos e Israel.
Los dos mejores avanzarán a los cuartos de final, donde se medirán a los clasificados del Grupo C. El torneo, en su sexta edición, se disputará del 5 al 17 de marzo en Estados Unidos, Japón y Puerto Rico.
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“Una misión más que ganar”
En declaraciones divulgadas por Feniba, Baker explicó que su decisión de aceptar la oferta estuvo motivada tanto por razones deportivas como personales.
“Tuve pláticas hasta de seis meses con Nemesio Porras, con Marvin Benard y George Santiago. Yo lo estuve pensando y en ese momento Dios me habló, me dijo ve adelante con esto, porque esto tiene una misión más que ganar un juego de pelota”, expresó.
El estratega aseguró que espera transmitir sus conocimientos a las nuevas generaciones, tal como en su juventud lo hicieron con él figuras legendarias como Willie Mays, Hank Aaron y Satchel Paige.
“Los otros países que enfrentaremos son superiores a nosotros, son unos caballos, todo está en contra de nosotros, pero lo bonito de este juego es que los partidos empiezan 0-0. Tendremos las mismas oportunidades que ellos de ganar un partido y debemos pensar en positivo”, subrayó.
Rivales de alto calibre
El Grupo D se perfila como uno de los más complicados de la primera fase. República Dominicana y Venezuela son potencias tradicionales del béisbol latinoamericano, con decenas de peloteros brillando en Grandes Ligas.
Países Bajos, por su parte, ha sido un rival competitivo en ediciones anteriores e Israel se ha consolidado como una selección incómoda de progresivo desarrollo en el escenario internacional.
Para Nicaragua, la llegada de Dusty Baker no solo significa un salto de calidad en lo deportivo, sino también un respaldo de prestigio que podría marcar un antes y un después en la proyección internacional de su béisbol.