El dictador de Nicaragua, Daniel Ortega, acusó públicamente este 28 de mayo a su hermano, el ex jefe del ejército sandinista, Humberto Ortega, de “traición a la patria”. Daniel Ortega reprochó a su hermano la entrega de la Medalla Camilo Ortega a un delegado militar estadounidense en 1990, durante el gobierno de Violeta Chamorro.
En una declaración televisada, Ortega calificó la acción de su hermano como una “vergüenza” y una “traición al pueblo y la patria”.
“El entonces jefe del Ejército de Nicaragua cometió el sacrilegio de entregar la medalla al valor Camilo Ortega Saavedra al yanqui. Qué vergüenza, qué traición al pueblo”, expresó el dictador.
El sanguinario dictador anunció un decreto presidencial que anula la condecoración otorgada por Humberto Ortega al delegado militar estadounidense en 1990, argumentando que esto representa una afrenta contra los “héroes de la revolución sandinista”, entre Camilo Ortega, hermano de ambos, quien murió combatiendo en 1978.
“En representación del pueblo presidente… reiteramos invalidar esa entrega, para borrar la afrenta que se cometió contra un héroe de la revolución sandinista”, leyó Ortega, en una plaza llena de policías y militares.
Humberto Ortega, fundador y ex jefe del Ejército de Nicaragua, ha sido una figura controvertida tanto dentro como fuera del país. Durante la administración de Violeta Chamorro (1990-1997), jugó un papel crucial en la transición pacífica del país después de la guerra civil.
Sin embargo, su relación con Daniel Ortega ha sido tensa, especialmente tras sus críticas a la gestión del actual régimen y a los planes de sucesión dinástica de la familia Ortega-Murillo.
Daniel Ortega, quien se atornilló al poder por los fraudes y la fuerza desde 2007, ha enfrentado múltiples críticas por su estilo autoritario, sanguinario y represivo contra la población civil.
La relación entre los hermanos se ha deteriorado significativamente, con Humberto Ortega abogando en varias ocasiones por el diálogo y la reconciliación nacional, contrastando con la postura maquiavélica y siniestra de Daniel y su pareja, Rosario Murillo.
La arremetida de Daniel Ortega se produce en un contexto de crecientes tensiones políticas y sociales en Nicaragua, donde la represión contra la oposición y la sociedad civil se ha intensificado desde 2018.
Humberto Ortega, quien se encuentra bajo arresto domiciliario, ha sido crítico de las acciones del régmen, lo que ha exacerbado las fricciones dentro de la familia Ortega-Murillo.
“El abuso que se cometió contra Camilo, combatiente heroico y ejemplar, hoy ha sido reivindicado para el honor y la gloria que merecen nuestros hermanos luchadores y vencedores”, declaró Murillo, co dictadora del régimen, quien ha tenido históricas desavenencias con Humberto Ortega.
Durante la conmemoración del 45 aniversario del inicio de la ofensiva final contra la dictadura de la familia Somoza, Daniel Ortega acusó a su hermano de traición a la patria, señalamiento que allana el camino para un proceso judicial en su contra, lo que marca un nuevo capítulo en la convulsa política nicaragüense y en la historia de una familia sanguinaria que ha marcado de luto y tragedia a todo un país durante décadas.
