Una propuesta bipartidista en el Senado estadounidense que busca repatriar o mantener los call centers en ese país podría poner en peligro miles de empleos en Centroamérica y otras partes del mundo.
La propuesta de los senadores Ruben Gallego (demócrata por Arizona) y Jim Justice (republicano por Virginia Occidental) llamada Keep Call Centers in America Act, es una propuesta legislativa bipartidista que pretende frenar la deslocalización de empleos en centros de llamadas y garantizar que, cuando los estadounidenses llamen a un servicio al cliente, puedan hablar con un operador humano ubicado dentro de los Estados Unidos.
“Si estás llamando a servicio al cliente, probablemente tu día no va bien. En esos momentos frustrantes, deberías poder hablar con un ser humano real aquí mismo, en EE.UU.”, afirmó Gallego.
Por su parte, Justice destacó que “los estadounidenses merecen un buen servicio” y que la medida “pone a los trabajadores de EE.UU. primero” al evitar que sean reemplazados por robots de inteligencia artificial o transferidos a centros en el extranjero.
La propuesta obligaría a las empresas a notificar al Departamento de Trabajo (DOL) con 120 días de antelación si planean trasladar operaciones de call center fuera del país. El DOL mantendría una lista pública de compañías que hayan externalizado estos servicios, las cuales quedarían inhabilitadas para recibir nuevos contratos o beneficios federales, además de pagar multas mensuales si mantienen la operación fuera de EE.UU.
El Keep Call Centers in America Act también requeriría que los trabajadores revelen la ubicación física del centro de llamadas o si se está utilizando IA en la atención. Si el cliente lo solicita, la comunicación deberá ser transferida a un centro en Estados Unidos. Además, las agencias federales darían preferencia en la adjudicación de contratos a empresas que no estén en la lista de infractores.
Según la Oficina de Estadísticas Laborales, los centros de llamadas emplean a unos 3 millones de personas en el país, pero se proyecta una pérdida de 150,000 empleos para 2033 debido a la externalización y al reemplazo por sistemas automatizados. Para el sindicato Communications Workers of America (CWA), la ley es “urgente y necesaria” para frenar “la carrera hacia el abismo” que implica la sustitución de trabajadores por IA y la migración de empleos al extranjero.