El juicio contra el exmagistrado Celso Gamboa arrancó este martes en Costa Rica con un giro político de alto voltaje: el presidente Rodrigo Chaves instó públicamente al Poder Judicial a agilizar su extradición a Estados Unidos. El exfuncionario está requerido por cargos de narcotráfico internacional.
“Entre más pronto lleven a ese señor a los Estados Unidos, es mejor para el país”, declaró Chaves durante su gira por Guanacaste, al ser consultado sobre el proceso judicial.
El mandatario afirmó que “todo el pueblo los está viendo” y advirtió, sin rodeos, a los magistrados de la Corte Plena: “Mucho ojo, señores magistrados, no los estoy amenazando. Es un consejo de amigo y de patriota”.
La inusual declaración presidencial se da en un momento delicado: Gamboa, exmagistrado de la Sala Tercera y exministro de Seguridad, enfrenta un doble proceso.
En Costa Rica es juzgado por tráfico de influencias, mientras que en Estados Unidos la DEA lo acusa de vínculos con una red internacional de narcotráfico.
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Gamboa se queja por condiciones carcelarias
Durante la apertura del juicio en el Tribunal Penal de Hacienda y de la Función Pública, la defensa de Gamboa denunció que su cliente está sometido a “trato indigno” en el centro penitenciario La Reforma, donde permanece bajo régimen de máxima seguridad.
Alegan que se encuentra en condiciones de aislamiento extremo, sin ventilación adecuada, expuesto a olores de aguas negras y con acceso muy limitado a llamadas, visitas y contacto con su equipo legal.
“Calor infernal y hedor insoportable”, describieron sus abogadas en un recurso presentado ante el Tribunal, solicitando la suspensión del juicio por vulneraciones al derecho a la defensa.
Sin embargo, la petición fue rechazada y el juicio continuará hasta el 8 de agosto, según el cronograma oficial.
Tribunal desestima maniobra dilatoria
Previo al inicio formal del debate, el tribunal también desestimó una solicitud de la defensa de Gamboa para recusar a dos jueces del caso.
El proceso involucra además a la exfiscala Berenice Smith y al exalcalde de San José, Johnny Araya, acusados de haber manipulado una causa penal en 2016 para eliminar el nombre de Araya antes de las elecciones municipales de ese año.
Araya se defendió asegurando que cuenta con todos los elementos para probar su inocencia, mientras que la defensa de Smith, representada por el exfiscal general Francisco Dall’Anese, criticó el uso político del proceso.
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Un nuevo extraditable pedido de Italia
Mientras avanza el caso Gamboa, el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) confirmó la detención de un nuevo costarricense requerido por la justicia internacional.
Se trata de un hombre de apellidos Ángulo Fernández, solicitado por Italia por presunto tráfico internacional de drogas.
Es el cuarto nacional cuya extradición ha sido solicitada en el último año, lo que confirma el creciente interés de autoridades extranjeras en costarricenses vinculados a redes transnacionales del crimen organizado.
El caso Gamboa, cargado de connotaciones políticas, judiciales y diplomáticas, ha escalado a un nivel sin precedentes.
No solo pone a prueba la independencia del Poder Judicial ante las presiones del Ejecutivo, sino que también expone las fallas estructurales del sistema penitenciario costarricense, señalado por organismos internacionales por su deterioro y condiciones precarias.
La extradición del exmagistrado, de concretarse, podría marcar un hito en la cooperación judicial entre Costa Rica y Estados Unidos, pero también tensar aún más el debate interno sobre justicia, soberanía y derechos fundamentales.