El Ministerio de Salud (Minsa) informó que hasta la primera semana de agosto de 2025 se han confirmado 9,434 casos de dengue en todo el país. De estos 8,363 no presentaron signos de alarma, 1,005 mostraron complicaciones y 66 fueron catalogados como dengue grave. Según el reporte epidemiológico oficial.
La situación preocupa porque la tasa de incidencia nacional llegó a 206 casos por cada 100 mil habitantes, una cifra que coloca a Panamá entre los países más afectados de Centroamérica. Los grupos con mayor riesgo son personas entre 10 y 59 años, quienes concentran la mayoría de los contagios.
Las provincias más golpeadas por la epidemia son la Región Metropolitana, con 2,643 casos y San Miguelito, con 1,832. También destacan Panamá Oeste con 1,095; Panamá Norte con 927; Chiriquí con 607 y Bocas del Toro con 517. Otras zonas como Los Santos, Veraguas, Darién y Colón también reportan cifras significativas.
En lo que va del año, 899 personas han requerido hospitalización y el Minsa confirmó 14 fallecimientos. Las muertes se distribuyen en Chiriquí 4, en Bocas del Toro son 3, en Darién se reportan 2, en Región Metropolitana se registran 2 y en Panamá Este, Coclé y San Miguelito se reportó 1 deceso en cada región.
Las acciones del gobierno de Panamá
Las autoridades de salud señalaron que actualmente circulan en Panamá los cuatro serotipos de dengue, con predominio de DEN-3 y DEN-4, lo que incrementa el riesgo de casos graves y fatales. Por ello, el Minsa ha reforzado los operativos de fumigación y control de vectores en todo el país.
Entre las medidas de prevención, el ministerio recomienda eliminar recipientes que acumulen agua, mantener las viviendas limpias, no automedicarse y acudir de inmediato a los centros d e salud si aparecen síntomas como fiebre, dolor de cabeza, malestar general o dolores musculares y oculares.
El Minsa insistió en que la lucha contra el dengue requiere del compromiso ciudadano. Sin la colaboración de la población para eliminar los criaderos de mosquito Aedes Aegypti, advierten, será difícil contener el repunte que hoy preocupa no solo a Panamá, sino a toda la región centroamericana.