El Ministerio de Educación (Mineduc) informó que más de 3 mil 500 centros educativos públicos continúan cerrados en Guatemala, a pesar de las resoluciones judiciales que ordenan a los maestros retornar a sus labores. La cartera señaló que aún persiste un grupo de docentes que no acata las disposiciones legales.
“Se mantienen en desobediencia”, declaró el viceministro Técnico de Educación, Francisco Cabrera, quien aseguró que el incumplimiento de los fallos judiciales afecta al 10 por ciento de las escuelas del país.
Cabrera agregó que, si bien el número de establecimientos sin presencia de maestros era mayor la semana pasada, aún se espera un retorno gradual a las aulas durante los próximos días.
El pronunciamiento del Mineduc se dio luego de que el pasado lunes miembros del Sindicato de Trabajadoras y Trabajadores de la Educación de Guatemala (STEG) desmontaran el campamento que mantuvieron por 57 días en la Plaza de la Constitución, en la zona 1 capitalina.
La decisión de retirarse se dio tras una jornada de manifestaciones frente al Palacio Nacional de la Cultura y después de recibir una segunda sanción económica de Q4 mil por mantener suspendidas las clases.
Las dirigencias sindicales, tanto a nivel nacional como departamental y municipal, fueron advertidas de que podrían enfrentar nuevas medidas legales si persisten en desconocer las resoluciones de los tribunales.
La ministra de Educación, Anabella Giracca, señaló en una entrevista radial que el levantamiento del campamento no significa el cumplimiento de las órdenes judiciales. “Esperamos que acaten retomando las clases, que es lo verdaderamente importante para el sistema educativo”, expresó.
Los sindicalistas amenazaron el martes, en un comunicado, con más “acciones de protesta”, en su “lucha social”, aunque no especificaron cuáles serían estas.