El Instituto Costarricense de Investigación y Enseñanza en Nutrición y Salud (INCIENSA) confirmó este lunes la circulación en el país del virus de influenza A H3N2, subclado K, desde el pasado 14 de octubre. El hallazgo se realizó tras analizar muestras tomadas entre septiembre y noviembre, identificando hasta ahora siete contagios, todos con síntomas leves y sin requerir hospitalización.
Las autoridades de salud aseguraron que no se ha observado un aumento en la gravedad de los casos ni en el número de hospitalizaciones o fallecimientos asociados. Sin embargo, advierten que históricamente, las temporadas dominadas por este subtipo afectan con mayor severidad a las personas adultas mayores, por lo que piden extremar precauciones en este grupo.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha informado que la circulación de la influenza inició antes de lo habitual este año, con un incremento sostenido desde agosto. Entre las variantes detectadas se encuentra el subclado K del virus H3N2, que ya ha sido identificado en diversos países del mundo, incluyendo varias naciones de América Latina.
Tanto la OMS como la Organización Panamericana de la Salud (OPS) coinciden en que, pese a los cambios del virus, la vacuna estacional contra la influenza continúa siendo efectiva, especialmente para prevenir hospitalizaciones. Por ello, el Ministerio de Salud de Costa Rica hizo un llamado urgente a la población de riesgo —niños, adultos mayores y personas con enfermedades crónicas— a mantener sus esquemas de vacunación al día y reforzar medidas de protección.
Las autoridades también recomendaron evitar aglomeraciones, practicar higiene frecuente de manos, mantener ventilación en espacios cerrados y acudir al centro de salud más cercano ante la presencia de síntomas respiratorios. Estas medidas, señalaron, no solo ayudan a prevenir la influenza, sino también otras enfermedades comunes de la época como las infecciones gastrointestinales.