Belice, Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Honduras, México y Panamá, todos miembros del Marco Integral Regional para la Protección y Soluciones (MIRPS), cerraron una reunión clave adoptando la Declaración de Heredia, un documento que busca fortalecer la protección a las personas desplazadas y mejorar la coordinación regional.
Según la Organización de Estados Americanos (OEA), Centroamérica atraviesa uno de los flujos de desplazamiento más grandes del continente, impulsado principalmente por la violencia criminal, la inestabilidad política y las brechas económicas que expulsa a miles de familias cada año.
Los países firmantes subrayaron la urgencia de implementar medidas inmediatas para asistir a las más de 1,7 millones de personas desplazadas en la región. Señalaron que este es un reto que supera fronteras y que necesita cooperación entre gobiernos, organismos financieros y mecanismos regionales especializados.
El Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados, Filippo Grandi, destacó que el MIRPS evidencia que “el diálogo, la cooperación y la responsabilidad compartida no solo son posibles, sino indispensables”. También recordó que el derecho a solicitar asilo es una obligación moral y legal que fortalece a los Estados.
En un contexto donde varios gobiernos del continente endurecen sus políticas migratorias, Grandi insistió en que brindar protección no es opcional, sino parte de los compromisos internacionales adquiridos por los Estados centroamericanos.
El secretario general de la OEA, Albert Ramdin, celebró que el MIRPS se consolide como un “modelo de acción coordinada”. Recordó además que el Fondo MIRPS, financiado por España, benefició en 2025 a más de 24,000 personas desplazadas por medio de proyectos ejecutados en distintos países del istmo.
Las autoridades regionales indicaron que una respuesta efectiva pasa por fortalecer la atención en los países de origen, mejorar los mecanismos en los puntos de tránsito y garantizar condiciones seguras en los destinos finales, especialmente en comunidades vulnerables.
El MIRPS forma parte de los compromisos del Pacto Mundial sobre los Refugiados, alineado con los esfuerzos internacionales para aliviar la presión migratoria y brindar soluciones duraderas en un continente donde las crisis humanitarias continúan en aumento.
