Capturan banda de centroamericanos y salvadoreños que hurtaba celulares en transporte público en El Salvador

La estructura delictiva, dirigida por dos nicaragüenses, operaba en el transporte público desde 2021 y vendía los celulares robados en el centro de San Salvador. Hay hondureños, nicaragüenses, salvadoreños y un guatemalteco detenidos.

La Policía salvadoreña presentó a los 37 detenidos este lunes.

Las autoridades salvadoreñas desarticularon una banda dedicada al hurto de celulares en unidades del transporte público en diferentes partes del país, capturando a 37 personas de distintas nacionalidades, entre ellas 17 hondureños, 8 nicaragüenses, 11 salvadoreños y un guatemalteco, informó este lunes el fiscal general, Rodolfo Delgado.

La acción, denominada Operación Carteristas, permitió identificar y capturar a los miembros de esta estructura criminal, quienes operaban en buses y puntos de alto tráfico de pasajeros.

Según las investigaciones de la Fiscalía General de la República (FGR), la estructura comenzó a operar en 2021 y estaba liderada por los ciudadanos nicaragüenses Joel Isaías Guerrero Siu y Rodrigo José Guerrero Siu, quienes coordinaban los robos cometidos en autobuses y la posterior reventa de los dispositivos móviles en el centro de San Salvador.

Los 37 capturados serán procesados por los delitos de agrupaciones ilícitas y resistencia, mientras continúa la búsqueda de los prófugos.

Salvadoreños y extranjeros detenidos por presuntamente formar parte de una banda de robacelulares.

Investigación detectó patrón de robos en transporte colectivo

El fiscal general, Rodolfo Delgado, explicó que las investigaciones establecieron que el grupo cometía robos en múltiples rutas, afectando a usuarios en todo el país.

“El Estado salvadoreño no va a permitir que bandas organizadas, sean nacionales o extranjeras, conviertan nuestros espacios públicos en un territorio de impunidad”, afirmó Delgado.

Además, indicó que las víctimas eran principalmente trabajadores, estudiantes y padres de familia que dependen del transporte público para movilizarse diariamente.

“A ellos les debemos protección, justicia y respuestas”, añadió.

No serán deportados sino procesados 

El ministro de Seguridad, Gustavo Villatoro, aseguró que los capturados no serán deportados, sino procesados bajo el sistema penal salvadoreño.

“No vamos a expulsar a estos criminales, los vamos a someter a nuestro proceso penal y los vamos a tener en nuestras cárceles”, afirmó el ministro.

Villatoro también explicó que capturar a esta estructura en fase temprana evitó su consolidación como una red criminal transnacional.

“Nosotros en el Gabinete de Seguridad tenemos la empatía correcta, no estamos teniendo empatía por este tipo de rateros que se dedican a extraer bienes que nunca sudaron, que nunca trabajaron, que nunca devengaron, sean nacionales o internacionales, los vamos a sacar de las calles”, finalizó Villatoro.

Coordinación entre Migración y Fiscalía permitió captura

El director de Migración y Extranjería, Ricardo Cucalón, detalló que se realizaron inspecciones que revelaron conductas sospechosas en varios individuos de origen extranjero.

Durante los controles, las autoridades detectaron que los sospechosos portaban múltiples teléfonos sin justificar su procedencia, lo que activó el proceso de investigación.

“Migración trasladó los hallazgos a la Fiscalía y, a partir de esta coordinación, se efectuó el operativo el 31 de octubre”, explicó Cucalón.

Rutas y zonas afectadas

La red operaba principalmente en San Salvador, Santa Ana, San Miguel y La Libertad, populosas ciudades.

Las autoridades señalaron que estas unidades son frecuentadas por miles de usuarios cada día, lo que facilitaba el actuar de la estructura.

“El Estado salvadoreño no va a permitir que bandas organizadas conviertan nuestros buses o espacios públicos en territorios de impunidad”, expresó el fiscal Delgado, al referirse a la gravedad del caso y al impacto directo que estas acciones tienen en trabajadores, estudiantes y madres de familia que dependen del transporte colectivo.

Los delincuentes operaban en grupos de tres a cinco personas. Mientras unos distraían a las víctimas, otro sustraía el celular de carteras o bolsos y un tercero lo guardaba para luego bajarse del autobús. Posteriormente, entregaban el aparato robado a un cuarto integrante que lo ocultaba hasta reunirse con el resto de la banda en un punto previamente acordado.

La FGR detalló que algunos de los capturados ingresaron ilegalmente al país por pasos fronterizos no habilitados, mientras que otros fingieron ser turistas para quedarse en el país y delinquir. Al menos cinco miembros de esta organización se encuentran prófugos.

Durante los operativos de allanamiento en distintos puntos del país, las autoridades incautaron 39 teléfonos móviles, dinero en efectivo, recibos de transferencias bancarias, dispositivos electrónicos, un arma de fuego, un cargador, municiones y un vehículo que habría sido utilizado para facilitar los robos.

 

Exit mobile version