El viernes 8 de septiembre, el sacerdote Osman José Amador Guillén, de 36 años, fue secuestrado por agentes de la Policía del régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo en la Catedral Nuestra Señora del Rosario en Estelí.
El secuestro tuvo lugar alrededor de las 10:00 de la noche, cuando un grupo de oficiales antidisturbios irrumpió en el templo durante una reunión del clero, sin dar explicaciones sobre su acción.
Se sospecha que este secuestro podría ser una represalia del régimen, ya que el padre Amador ha estado incluyendo oraciones por la libertad de monseñor Rolando Álvarez, obispo de la Diócesis de Matagalpa y administrador apostólico de la Diócesis de Estelí, en sus últimas homilías.
Álvarez fue condenado a 26 años de prisión luego de negarse a ser desterrado a Estados Unidos bajo acusaciones de “traición a la patria” y “difusión de noticias falsas”.
Es importante mencionar que el padre Amador fue el último director de Cáritas Diocesana de Estelí, una organización que fue cancelada por el régimen en marzo de 2023.
Esto genera preocupación de que pueda estar relacionado con el caso de lo sacerdotes Pastor Eugenio Rodríguez Benavides y Leonardo Guevara Gutiérrez, quienes actualmente se encuentran detenidos en una ubicación no revelada en Managua.
Hace más de 90 días, la Policía secuestró a los sacerdotes Rodríguez y Guevara y comenzó una investigación contra la Iglesia por presunto lavado de activos, pero el régimen no ha proporcionado información alguna sobre el caso, pese a haber congelado las cuentas de las diócesis y cuentas personales de los sacerdotes.
Según la abogada Martha Patricia Molina, investigadora independiente, esto sugiere “que carecen de pruebas sustanciales y están desesperados por inculpar a alguien”.
#SOSNicaragua #LibertadYa #SonInocentes El sacerdote Osman José Amador Guillén originario de Wiwilí, Nueva Segovia, quién se encontraba reubicado en este momento en la Diócesis de Estelí, fue secuestrado por la el régimen de Ortega Murillo ayer en altas horas de la noche. No se… pic.twitter.com/FI3voWaEzm
— Somos La Resistencia (@SomosSLR) September 9, 2023
Este secuestro se suma a una serie de ataques contra la Iglesia católica en Nicaragua desde 2018 y arreciadas desde 2022.
Además del padre Amador, el obispo Rolando Álvarez, el padre Manuel Salvador García, el padre Leonardo Urbina y el padre Jaime Iván Montesinos Sauceda se encuentran detenidos.
También se ha obligado al exilio a numerosos sacerdotes y monjas que llevaban mucho tiempo trabajando en el país.
El último en ser desterrado fue el sacerdote nicaragüense Mauricio Valdivia Prado, rector y director del Colegio Calasanz en Managua, a quien las autoridades prohibieron la entrada al país después de un viaje a República Dominicana.