En medio de un ambiente político crispado y con el Consejo Nacional Electoral (CNE) empantanado por la falta de consensos, el Partido Libertad y Refundación (Libre) oficializó este su respaldo a su candidata presidencial, Rixi Moncada, quien se negó a participar en debates públicos con los otros aspirantes al asegurar que “no debato con golpistas ni operadores de fraudes”.
A través de un comunicado emitido tras una sesión extraordinaria de su Coordinación Nacional, Libre reafirmó su apoyo a Moncada y anunció una convocatoria nacional para movilizaciones masivas el próximo 1 de agosto en Tegucigalpa, en protesta contra lo que califican como una “imposición del bipartidismo golpista” en el sistema electoral.
“La Coordinación Nacional del Partido Libre, reunida en sesión extraordinaria para discutir medidas y acciones urgentes, aprueba por unanimidad condenar la delictuosa imposición del bipartidismo golpista representado en el CNE, que violando la Constitución aprobó una enmienda al sistema de transmisión y divulgación de resultados electorales preliminares (TREP), fraudulenta y corrupta”, señala el comunicado.
Libre acusó a los candidatos Salvador Nasralla y Nasry Asfura de formar parte de una supuesta maquinaria de control del CNE y de defender intereses de grupos económicos. Además, rechazó lo que denominó “campaña sucia” y “noticias falsas” difundidas por medios de comunicación afines al oficialismo.
La declaración oficialista se publica en un contexto de creciente tensión preelectoral. El CNE lleva días sin lograr avances debido a la negativa del representante de Libre, Marlon Ochoa, de participar en las sesiones convocadas, lo que ha complicado la toma de decisiones clave para el proceso electoral de noviembre próximo.
“Mi debate es y será directo con el pueblo. Promuevo y practico un diálogo amplio y abierto. No caeré en el juego de la provocación y el insulto”, afirmó Moncada, según recoge el comunicado de su partido.
Libre exhortó a su militancia y a “todo el pueblo digno en resistencia” a iniciar desde el 1 de agosto una movilización continua desde los 18 departamentos del país hacia la capital, “sin límite de tiempo”, con el objetivo de exigir transparencia en el proceso electoral y respeto a la voluntad popular.
Las elecciones generales en Honduras serán el 30 de noviembre próximo.