El presidente de Panamá, José Raúl Mulino, desmintió este sábado las afirmaciones del exasesor de Seguridad Nacional de Estados Unidos, John Bolton, quien aseguró que el gobierno panameño solicitó presencia militar estadounidense en la región del Darién durante la crisis migratoria. Las declaraciones fueron publicadas por el diario El País de España y calificadas por el mandatario como “falsas y temerarias”.
En un comunicado oficial, el Gobierno panameño recalcó que la gestión de la crisis en la frontera del Darién fue realizada exclusivamente por fuerzas nacionales, con recursos propios y el respaldo de organismos internacionales, sin haber requerido en ningún momento apoyo militar extranjero.
Desmiento por falsas y temerarias declaraciones del ex asesor de Seguridad Nacional de EEUU John Bolton, que recoge el diario El Pais, en el sentido de que mi gobierno pidió presencia norteamericana en Darien cuando existía la crisis migratoria. Esa frontera se cerró gracias al…
— José Raúl Mulino (@JoseRaulMulino) May 31, 2025
“Esa frontera se cerró gracias al esfuerzo y determinación de Panamá integralmente, sin requerir jamás semejante cosa”, expresó Mulino.
El Ejecutivo también recordó que el acuerdo firmado con Estados Unidos el 1 de julio de 2024, bajo la administración Biden, contempló únicamente apoyo logístico para vuelos de repatriación, los cuales permitieron la deportación de miles de migrantes con antecedentes penales. En ningún punto se contempló el despliegue de tropas o asistencia militar.
#Comunicado | El presidente Mulino desmiente categóricamente a John Bolton y rechaza sus declaraciones temerarias. Panamá actúa con soberanía. pic.twitter.com/FtaxpIvxGm
— Presidencia de la República de Panamá (@presidenciapma) June 1, 2025
Mulino reprochó a Bolton por “faltarle el respeto al pueblo panameño y, en particular, a las fuerzas de seguridad” que operaron en condiciones adversas con “valentía y coraje”. Además, instó al exfuncionario estadounidense a resolver sus diferencias personales “en las esferas correspondientes” y a abstenerse de emitir declaraciones que califica como “difamatorias” hacia el presidente de una nación soberana.