Gobierno de Trump afirma que cumple con la orden de haber repatriado a migrante salvadoreño deportado por error

Abogados de Kilmar Ábrego, quien permaneció en una prisión de máxima seguridad en El Salvador tras ser expulsado junto a decenas de presuntos delincuentes, insisten en que hubo desacato judicial y exigen rendición de cuentas.

Kímar Ábrego y el senador de Estados Unidos, Chris Van Hollen (demócrata), durante una visita del político en El Salvador.

La administración del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, aseguró ante una corte federal en Maryland que cumplió con la orden de repatriar a Kilmar Ábrego García, un migrante salvadoreño que fue deportado por error a El Salvador, a pesar de una orden judicial que prohibía su expulsión.

La defensa de Ábrego sostiene que el gobierno incurrió en desacato, ya que no sólo desobedeció una orden previa, sino que además prolongó innecesariamente su retorno a Estados Unidos.

Ábrego fue deportado en marzo a El Salvador, específicamente a la megaprisión Centro de Confinamiento del Terrorismo (CECOT), a pesar de una orden judicial de 2019 que prohibía su expulsión por temor a persecución.

Las autoridades estadounidenses lo vincularon con la pandilla MS-13, una acusación que su familia y abogados rechazan categóricamente.

El migrante fue devuelto al país el viernes pasado para enfrentar cargos penales en Tennessee, luego de una batalla legal que incluyó acusaciones de desacato contra el gobierno. La jueza federal Paula Xinis había ordenado facilitar su regreso.

En una presentación judicial del martes, el Departamento de Justicia afirmó que “los demandados han hecho exactamente lo que los demandantes solicitaron y lo que este Tribunal les ordenó: el demandante Ábrego García ha sido devuelto a Estados Unidos”.

El gobierno sostuvo que mantuvo conversaciones diplomáticas con El Salvador para concretar su retorno y pidió al tribunal suspender todos los plazos del caso, adelantando que presentará una moción para cerrarlo la próxima semana.

Por su parte, los abogados del migrante aseguran que el caso no está cerrado, y alegan que el tribunal debe seguir supervisando para garantizar que el proceso legal se maneje como si Ábrego nunca hubiera sido expulsado indebidamente. También exigen que el gobierno rinda cuentas por lo que consideran “violaciones flagrantes y deliberadas” de las órdenes judiciales.

El Departamento de Justicia calificó esas acusaciones como “desesperadas y decepcionantes”, argumentando que el cumplimiento se dificultó por restricciones relacionadas con secretos de estado y material clasificado.

“Pero la prueba está en los hechos: los demandados han devuelto a Ábrego García a Estados Unidos tal como se les ordenó”, afirmaron.

Ábrego enfrenta dos cargos en una corte de Tennessee. Se le acusa de haber participado en una red que transportó a miles de migrantes indocumentados desde Texas hacia el interior del país, incluidos menores de edad, a cambio de importantes sumas de dinero.

Exit mobile version